De una estrategia de comunicación en la que privilegia los mítines y spots televisivos y desconfía de la mayoría de los medios por considerarlos al servicio de la “mafia del poder”, Andrés Manuel López Obrador se modernizó y añadió la trinchera de las redes sociales.

Se trata de algo que ni siquiera fue planeado por el ahora dirigente nacional de MORENA, sino que al ver éste los resultados de difusión de fotos y videos de mítines, como de sus posturas y que los comentarios a favor que superaban a los que recibía en contra, en Facebook, Twitter y Youtube, optó por potencializarlas.
Por dos décadas al menos, las del inicio su activismo político en Tabasco, López Obrador no contaba con escaparate alguno para enfrentar la ola de ataques en medios y guerra sucia, pues sus principales aliados eran los periódicos y revistas nacionales y algunas “muy honrosas excepciones”, en la entidad.

Tabasco HOY, Telerreportaje y La Verdad del Sureste eran en Tabasco a nivel local sus principales opciones; era imposible imaginarse lo que ahora es hashtag: #AMLO.

En una entrevista concedida en febrero pasado a Grupo Cantón, López Obrador no descartó que en caso de contender por la Presidencia en el 2018, tener que enfrentar una nueva “guerra sucia” de parte los hombres más ricos del país por considerar que ellos son los dueños de medios de información más influyentes.

Sin embargo, sostuvo que diferencia de las dos elecciones anteriores, los propios “machuchones” a como él los refiere en términos coloquiales, están conscientes que es más difícil manipular, sobre todo cuando a través redes sociales él puede esclarecer alguna acusación o bien recibir comentarios a favor más que en contra.

“Creo que ellos (los empresarios poderosos) están cambiando de parecer, porque las circunstancias también han cambiado. La gente está harta. Por ejemplo, ya no es lo mismo Televisa de hace 10 años a la Televisa de nuestros tiempos. Además, porque ya existe las redes sociales”, expresó en la entrevista publicada el 20 de febrero.

Unas semanas después, e 26 de mayo, López Obrador entronizó a las redes sociales como su principal estrategia de comunicación en una entrevista que le concedió a Carmen Aristegui.

“Ahora, afortunadamente existen las redes sociales, ya no estamos como antes que hasta rogábamos para que nos entrevistaran… Ahora, no, ya namás es cosa de subir al face o al Twitter nuestra versión. Antes, los más abiertos periodistas, los más independientes, nos entrevistaban una vez año para pagar la cuota; ahora no. ¡Bendita sean las redes sociales!”, dijo López Obrador.

Rey de las redes sociales

Para Javier Núñez López, ex dirigente estatal de MORENA, las redes sociales jugaron un factor determinante para colocar a López Obrador como puntero de encuestas desde inicios del 2017.
“El éxito de Andrés Manuel está relacionado con las redes sociales, a tal grado que para muchos es el rey de las redes sociales”, presume.

En el caso del Facebook, refiere Núñez, López Obrador no administraba la cuenta ni siquiera su equipo cercano, sino que era un grupo de jóvenes y hubo un momento en el que éste cede el manejo el trabajo a los colaboradores del presidente nacional de MORENA.

Núñez asegura que es precisamente la capacidad de respuesta en “tiempo real” de López Obrador en redes sociales y al mismo, la retransmisión de su mensaje que le ha ayudado a evitar nuevas acusaciones o “video-escándalos”.

“El video que se difundió de la candidata veracruzana Eva Cadena recibiendo un fajo dinero presuntamente para entregárselo a Andrés Manuel, fue un nuevo capítulo de la guerra sucia, por lo que la gente ya no se los cree y a diferencia de esas fechas en la que no se tenía acceso a la prensa y a la radio, las redes sociales le permiten fijar un posicionamiento inmediato”, explica.

En un corte realizado el pasado 16 de mayo, AMLO contaba con dos millones 527 mil 320 de seguidores en Twitter. De los demás aspirantes para participar en la contienda presidencial del 2018, quien le siguía en esa fecha, era Margarita Zavala con 952 mil 438