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Un nuevo orden

La tríada dialéctica expresa en lo que es la tesis, antítesis y síntesis, el desarrollo de una idea, fenómeno o acontecimiento en tres momentos, permitiendo la creación de algo nuevo a partir de algo ya establecido pero, pasando por un momento de contradicción y de replanteamiento de los hechos.

Todo esto viene a colación a raíz de los terremotos y la forma en cómo reaccionó la ciudadanía, fue asombroso observar que miles salieron a dar de sí, a entregar de forma desinteresada, tiempo, esfuerzo y algo más. Si bien es cierto que en el terremoto del 85, se pudo ya observar tal participación ciudadana, en ésta ocasión desbordó las expectativas de aquélla ocasión. Está de más hacer las descripciones del ímpetu mostrado, de las acciones solidarias que todos pudimos observar, pero lo que si debe de considerarse es que algo nuevo surgió; habrá sido generado por las redes sociales o por un deseo inconsciente de hacer un cambio, pero lo cierto es que, la ciudadanía no necesitó del gobierno, no espero recibir órdenes y su organización fue asombrosa. Fue a través de las redes que se pudo esclarecer ciertas malas intenciones del señor Graco en el estado de Morelos, fue por las redes que la ciudadanía denunciaba las intenciones de aprovecharse de las circunstancias por parte de políticos o seudo ciudadanos, fue por éstos medios que se ha podido continuar con las recolectas a favor de quienes fueron devastados y es por esto mismo, que la ciudadanía ha exigido el buen manejo de los fondos recibidos.

Lo cierto es que estamos ante un cambio en el proceder de la ciudadanía en relación a su gobierno, a grado tal que podemos atrevernos a establecer, que México puede ser quien instituya un nuevo orden mundial en la forma de gobernar. Sólo es cuestión de afinar lo que se desea: no mas gobierno controlador, no más gente que manipula cifras, no más parásitos del erario que no sirven ni para organizar ni dar instrucciones claras sobre algo.

El cambio se siente, la población está más involucrada, más consciente y más ávida de nuevas formas de lo que se llamaría un nuevo gobierno.

Tal vez ahora sea el momento de formar organismos ciudadanos libres de mañas políticas, tal vez las redes están empezando a ser parte de una nueva política de la comunicación, tal vez es tiempo de destetarnos de la clase política y encontrar el autogobierno emanado desde el pueblo, para el pueblo y por el pueblo, bajo nuevos lineamientos de control económico, político y social.

Publicado por
Redacción Quintana Roo