Parece que el flamante candidato de Morena a la gubernatura, José Luis Pech Várguez, carece se asesores y sobre todo de una cultura del cuidado ambiental, pues jamás le dijeron que la gente repudia que se coloquen pendones en los postes por contaminantes y porque afean la ciudad.

Y así, a la antigüita, la gente de Pech Várguez se puso a colocar los pendones en los postes de la ciudad con la foto del candidato y su gurú, el sempiterno aspirante a la Presidencia y dueño de Morena, Andrés Manuel López Obrador.

Esperemos que el candidato reconsidere su postura y retire esos pendones que en nada le ayudan y, por el contrario, sí lo pueden afectar, ya que la ciudadanía rechaza este tipo de promoción política.

Pero sobre todo, esperemos que la decisión de retirar la propaganda no sea demasiado tarde y otros candidatos empiecen a colocar la propia de igual manera a como lo hizo Pech.

Los candidatos deben entender que las campañas políticas deben ser de propuestas, no una competencia para ver quién ensucia más la ciudad con la foto de su rostro pegada sobre plástico.

Además deben tener bien en cuenta que se trata de un destino turístico que depende mucho de su imagen, de las bellezas a la vista que ofrece a millones de turistas, siendo entonces un doble o hasta triple agravio: contaminante, afectación a la imagen y al turismo.