Suegras, comadres y cuñadas, es tiempo ya de que en México se reconozca el papel que juega la mujer en la actualidad, su relevancia tanto en materia económica, política como en lo social, gracias a la capacidad y talento que a diario queda demostrado y que le es reconocido al ocupar cargos de la mayor importancia en forma destacada.
En todos los sectores, la mujer tiene ahora una presencia amplia siendo parte fundamental en el desarrollo de este país, dada su mayor integración en renglones y actividades en los que antes no se le permitía.
En materia política se debe resaltar la participación que tiene la mujer y que sin duda tendrá en el procesol electoral de 2018, ya que sigue siendo mayoría con casi el 52 por ciento de la población nacional.
Gran paso se ha dado en cuestión democrática, y hoy los partidos políticos tienen la oportunidad de reconocer el trabajo, el esfuerzo y la dedicación que han realizado las mujeres en materia político-electoral.
La disciplina, la institucionalidad y la ardua labor partidista son virtudes con las que cuentan las mujeres y que muy son puestas a disposición de la sociedad a través de los gobiernos, los órganos legislativos y el poder judicial.
Se trata de un merecido reconocimiento a las mujeres leales y trabajadoras en el próximo proceso electoral.
Al referirme al reconocimiento en el próximo proceso electoral, no sólo es sobre candidturas y legítimas aspiraciones, sino también en el trabajo de campo que realizan a favor del partido de su preferencia para ganar la confianza de la sociedad.
Y aún cuando no se vislumbre una próxima mujer presidenta de México, estoy convencida que esto no tardará muchos sexenios más.