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En Veracruz pusieron a Gina Domínguez en la cárcel y van por Silva ¿Cuándo investigaremos a Rangel Rosado?

Gina Domínguez fue una de las mujeres que colaboraron para Mario Villanueva Madrid.
Como llegó a Cancún como reportera, la incorporó al Sistema Quintanarroense de Radio y Televisión.
Como varias de ellas, terminó su relación con un pleito que la obligó a regresar a Veracruz, literalmente con una mano detrás, donde consiguió incorporarse al DIF de la esposa de Fidel Herrera Beltrán y luego al equipo de Javier Duarte.
Hoy está en la cárcel, acusada de un “faltante” superior a los 100 millones de pesos, que dicen es un pecado muy menor para la inmensa cantidad de dinero que pasó por sus manos. Su sucesor, Alberto Silva Ramos, a quien Duarte pretendió convertir en candidato a gobernador, famoso por su prepotencia que le trajo el apodo de “El Cisne”, está en proceso de ser desaforado como diputado federal.
La Fiscalía de Veracruz, que acusó penalmente a Gina Domínguez, tiene pruebas de un mecanismo, que utilizaron ambos, para desviar más de cuatro mil millones de pesos de distintas dependencias, como la Secretaría de Desarrollo Social de Veracruz, recursos que supuestamente iban a pagar “campañas de divulgación” contratadas con empresas “fantasma”.
De lo que quedó en sus manos, una parte pequeña por lo visto, se desprende la compra de residencias y negocios en Veracruz.
Con estos hechos queda demostrado que, a voluntad del gobernador, la coordinación de comunicación social puede convertirse en un “negocio” de muchos ceros para su titular.
En Quintana Roo todos conocimos lo que significó Rangel Rosado para la prensa. Recordemos los insultos, agravios verdaderamente insultantes, que se ordenaban en contra de los periodistas que se atrevían a cuestionar al gobernador o al mismo Rosado. En mi caso existe una carpeta con más de 3 mil mensajes en Tuiter que salieron de esa oficina, de “Cesarin” y de varios operadores del PRI que fue frenada desde oficinas de la Ciudad de México ante mi queja.
¿Y las publicaciones que se hicieron en las primeras páginas de varios diarios locales? Con ese mismo tono inmoral de agravio. ¿Recordamos el intercambio de correos entre Rangel Rosado y Lilia Arellano, donde ésta le reclama que “acelere” el pago extraordinario, mensual, de 600 mil pesos durante la campaña política intermedia? Y las instrucciones “políticas” que le enviaban a la “conductora de televisión”… Todo esto aparte de los casi 700 mil pesos mensuales que recibió por su “programa de televisión” mediante factura.
La lista donde supuestamente le pagaban a “periodistas” no era el manejo más significativo de dinero, porque este rubro estaba facturado y pasaba por la secretaría de Finanzas, sino el dinero que Rangel manejó en efectivo y que no llegaba a sus “destinatarios”… ¿Cuántas empresas fantasmas, como en Veracruz, existieron? ¿Cuánto se dijo que se pagaba a periodistas nacionales sin hacerlo, y vaya que fueron cantidades millonarias? ¿Cuánto dinero se entregó a “presuntos” asesores de prensa nacional que jamás dieron golpe? ¿De dónde salió el dinero que supuestamente se entregaba en efectivo a los directores de los medios, y realmente llegó a sus manos?
¿O es que a ninguno le interesa investigar en ese ámbito?
¿Hizo algo Rosado por los periodistas de Quintana Roo?
Preguntas que surgen al ver a los jefes de prensa de Veracruz, de Duarte, en la cárcel o a punto de entrar a ésta…
En Twitter: @isabelarvide Blog: CambioQRR.com

Publicado por
Redacción Quintana Roo