La secretaria de Salud, Alejandra Aguirre Castro, reconoció desabasto de medicamentos en los hospitales del sector público y, como siempre, intentó culpar a la administración de Roberto Borge; sin embargo, nada justifica que la gente se quede sin medicinas.
De acuerdo a la información de un portal local, la falta de recursos ocasiona que el sector salud aún no firme los convenios con los proveedores de medicamentos.
Lo anterior significa que pretenden señalar cobardemente a la anterior administración sobre este grave problema y justificar la falta de recursos para no dar medicinas a la gente, cuando gastan en muchas otras banalidades como lo es un estúpido software, supuestamente para ayudar al control de las finanzas estatales, cuando la realidad es que será utilizado para el espionaje.
El software ya aprobado por el Gobierno y que incluso quizá ya lo tiene en su poder, costó la módica cantidad de 400 mdp.
¿Esta es la forma en que el gobierno de Carlos Joaquín González pretende tener un acercamiento con la ciudadanía?
La salud, tanto como la educación, la alimentación y la seguridad son los pilares básicos que todo gobierno debe brindar a su población, y si no hay medicamentos, entonces está fallando gravemente a una de sus obligaciones primordiales.
Según la titular de Salud, Quintana Roo hoy padece un desabasto de medicinas de entre el 35 y 45 por ciento, lo cual puede convertirse en el Talón de Aquiles, de una administración que ni siquiera sabe jerarquizar prioridades.
¡Basta de culpar a la administración anterior de toda la incapacidad de la actual!
Bien dicen que con la salud no se juega. La gente no acepta ni aceptará pretexto alguno.