Los lamentables hechos que cobraron la vida de varias personas en pleno centro de Playa del Carmen se pudieron evitar. Muchos fueron los señalamientos que se hicieron en torno a las irregularidades que generó, desde su primera edición, el festival de música electrónica BPM, por lo que se había señalado la necesidad de dos cosas: mover las actividades lejos del centro de la Ciudad y, celebrarlo en otra época del año para no empatarlo con la temporada alta del turismo familiar.
Si bien, las acciones que apuntan a la prevención resultan fundamentales en todo momento, la planeación de las actividades que se realizan en el municipio debe atender a las experiencias que ya se tienen con aquéllos eventos que se registran periódicamente. Por ello es que, tanto ciudadanos como empresarios llamamos en su momento la atención de la autoridad en el sentido de que, cada año, la presencia de jóvenes intoxicados en condiciones deplorables se hizo más evidente.
Es decir, no es posible que si se registra el incremento de un problema con cada edición de un festival, la autoridad no considere medidas adicionales de seguridad. Ésta es una llamada de atención para revisar todas las actividades que se desarrollan en la Riviera Maya, pues más allá de las consecuencias en términos de afectación turística por los hechos, como el registrado la madrugada del 16 de enero, nos enlutan, nos marcan.
Como empresarios, reconocemos que el esfuerzo que hace el gobierno municipal para prevenir actos delictivos para garantizar la seguridad de todas las personas que nos visitan, sin embargo, como sector empresarial, consideramos que es importante contar con una base de la gendarmería mayor presencia policíaca.
Como lo hemos manifestado ya, no podemos tapar el sol con un dedo, un acto de violencia como el acontecido la madrugada del 16 de enero, nos ha vulnerado, la noticia ha dado la vuelta al mundo y ahora, no tenemos más opción que redoblar esfuerzos para recuperar la imagen de la Riviera Maya.
Por lo pronto, la postura del sector empresarial ha sido que no es posible que se sigan llevando a efecto eventos como el BPM a lo que el gobierno municipal ha reaccionado positivamente anunciando la cancelación de futuros festivales; no sólo del BPM.
La llegada de turistas que nos visitan en plan familiar y ocupan las habitaciones de los hoteles de la Riviera Maya nos garantiza una alta ocupación y derrama económica durante todo el año y en especial en estas fechas, no es necesario poner en riesgo la seguridad de turistas y habitantes de la Riviera Maya con eventos que están fuertemente vinculados con los excesos.