La cultura ambiental, entendida como aquella postura ante la vida que nos permite cuidar y preservar nuestro medio ambiente, es un asunto de interés para todo el mundo, pero al parecer en la capital del estado no es urgente promoverla. En el desarrollo de estos aspectos culturales, deben participar los niños y los jóvenes que hoy cursan su educación básica y a quienes se les debe preparar para que se despierte en ellos el interés por comprender los alcances que el cuidado del medio ambiente tiene para beneficio de todos.
Hace unos días gracias a un empresario comprometido con la ciudad, que ve con preocupación y tristeza que las nuevas generaciones carecen de valores y algunos de materias gris, este amigo me envió unas fotografías en donde comprobé lo grave del asunto y de lo que me quería dar a entender y quiero compartirlo con ustedes, sobre todo a los padres de familia para que desde sus hogares inculquen en sus vástagos el cuidado a su ciudad y desde luego al medio ambiente.
Las fotografías tomadas y que enviaron amablemente a mi correo electrónico mostraban un completo cochinero que dejan estos juniors en los estacionamientos que se ubican sobre el boulevard bahía esto y pese a que muy cerca de ellos se colocaron contenedores de basura para evitar precisamente lo que estos chamacos pubertos hacen cada fin de semana que sin el menor grado de conciencia avientan en el piso o de plano en las aguas de la bahía envases de cerveza, licor, basura de las botanas y hasta condones todo esto en parte por la falta de educación que recibieron desde su infancia y otra solapado por las autoridades. Una idea que podrían aplicar las autoridades si es que les interesa dar una buena imagen al turismo y sobre todo a la gente que se para muy temprano a hacer ejercicio sobre nuestro hermoso boulevard, es restringir el estacionamiento a determinadas horas, es decir, después de las 10 de la noche hasta 5 de la mañana prohibido estacionarse.