Alguien te habla entre susurros para contarte un cuento o algo de su vida; escuchás el sonido de la lluvia en tu ventana y extrañamente comienzas a relajarte. Una sensación de cosquilleo o caricia que va desde la coronilla hasta la nuca. ¿Nunca te pasó? ¡Eso que experimentas tiene un nombre!
Estamos hablando de ASMR. Un fenómeno que seguro sentiste alguna vez, pero que nadie antes había definido.
ASMR son las siglas en inglés de Respuesta Sensorial Meridiana Autónoma. Y como te decía antes, hasta hace poco tiempo, nadie se había puesto a analizar ni a estudiar este fenómeno sensorial.
Para muchos, se trata de algo así como un “orgasmo cerebral“, algo placentero y relajante que aflora como un sutil hormigueo que comienza en la cabeza y se puede extender a otras partes del cuerpo.
Los estímulos pueden variar de persona a persona y hasta hay quienes no lo sienten. ¿No sentir está bien? Nadie lo sabe con certeza.
Lo que sí podemos afirmar es que aquellas personas que experimentan esta respuesta sensorial, o ASMR, generalmente responden a sonidos o sensaciones. Puede ser desde que les toquen el pelo suavemente hasta el ruido de desenvolver un caramelo.
Hay dos tipos de estímulos: el voluntario y el involuntario. Muchos entran a este mundo a través del segundo, casi por accidente.
Los Whisperers son una comunidad de Youtubbers que hacen videos exclusivamente para generar este tipo de respuestas o ASMRs en la gente que los ve o los oye.
¿Qué tipo de videos podemos encontrar? Conversaciones entre susurros, minuciosos roleplays, que pueden ir desde una visita al médico hasta una situación en una peluquería; gente hablando en otros idiomas; el sonido al hojear un libro o una revista, etc.
¿Una locura, no? Las personas que experimentan esta sensación intentan encontrarle una explicación que la ciencia aún no exploró.
Mientras, puedo ir dejándote un video para que veas y, quién sabe, puedas sentir de qué estoy hablando. Ponete los auriculares y metete en el mundo ASMR.