REDACCIÓN / GRUPO CANTÓN
Playa del Carmen.- Un salto en paracaídas que prometía ser una experiencia inolvidable en los cielos de Playa del Carmen se convirtió en una escena de alto riesgo, cuando el paracaídas principal falló durante el descenso. La rápida reacción del instructor evitó lo que pudo haber sido una tragedia, dejando a ambos ilesos, pero marcados por el impacto del incidente.
El suceso ocurrió la tarde de este jueves, cuando un instructor y su cliente saltaron desde una avioneta que despegó del aeródromo local, ubicado en la avenida 15 con 5 Sur. Durante el descenso, el instructor detectó una falla crítica en el paracaídas principal y activó con precisión el paracaídas de emergencia, lo que permitió realizar un aterrizaje forzoso, pero seguro, en la zona de Chenzubul, cerca de la costa en la Colonia Colosio.
El aterrizaje de emergencia desató una rápida respuesta de Protección Civil y los cuerpos de rescate, quienes llegaron al lugar para brindar asistencia a los involucrados. Afortunadamente, el instructor y el turista fueron hallados ilesos, sin necesidad de atención médica. “El entrenamiento y los protocolos funcionaron exactamente como deberían en una situación de vida o muerte”, afirmó un miembro del equipo de emergencia que participó en el rescate.
Tras el incidente, las autoridades municipales iniciaron una revisión exhaustiva de los protocolos de seguridad y la documentación de la empresa responsable de la actividad. El objetivo es garantizar que se cumplan todas las normativas para evitar que futuros accidentes pongan en riesgo la vida de los participantes en este tipo de deportes extremos.
El riesgo en los deportes extremos
Este incidente subraya la delgada línea entre la adrenalina y el peligro en actividades extremas. La experiencia, la preparación y los sistemas de respaldo fueron claves para convertir lo que pudo haber sido una tragedia en una historia de supervivencia.
El incidente, presenciado por curiosos y habitantes locales, deja una importante reflexión: en los deportes extremos, la vida puede depender de segundos y decisiones críticas. Playa del Carmen vivió un episodio que, aunque dramático, culminó con un final afortunado, dejando a los involucrados con una historia que podrán contar.