HOLBOX,Quintana Roo.-Hay muchas historias por contar de la isla de Holbox, lugar de los Correa Moguel, Gasca, Cetina, Ávila, Argaez y otros que en su momento se sumaron al desarrollo de este lugar, que por muchos siglos estuvo abarrotado de piratas.
Y es que por su posición estratégica permitía ser un refugio seguro, no fue, sino que hasta 1873 se asentaron aquí los primeros corsarios europeos, que se enamoraron del lugar y decidieron hacer su vida aquí.
A finales del siglo pasado, las islas más grandes, que estaban más protegidas del mar abierto como lo es Holbox, recibían sobrevivientes de Yucatán que huían de la Guerra de Castas que fue una conocida rebelión social Maya y posteriormente, en enero de 1891, se establecieron en esta isla.
Algunas personas de Yucatán iniciaron la colonización del norte de la península que se vino dando entre los años 1880 y 1920, con objeto de agrandar la frontera agropecuaria y forestal de aquel estado.
Por ello, al comenzar el siglo ya existían haciendas y poblados cercanos a Holbox como Solferino, Yalahau, Chiquilá, San Ángel y El Ideal, poblados que se encuentran en el camino que va desde Cancún a Chiquilá donde salen los ferris a Holbox.
A principios del siglo XX, la zona entre Isla Mujeres y Holbox estaba ocupada por explotadores de árboles de chicle, sal, así como arboles de maderas preciosas.
La población Quintana Roo se conformó en ocho municipios, que por razones económicas fueron divididos en tres zonas: norte, centro y sur; la zona norte comprendía los municipios de Lázaro Cárdenas, Cozumel, Isla Mujeres y Benito Juárez.
Los poblados siguieron ubicados junto a las costas a principios del siglo XX, pero empezaron a sufrir el proceso de ocupación. En 1960 su población se mantuvo en 500 habitantes.
La década de los 60 fue importante para Quintana Roo, pues cambió su estructura poblacional y en 1974, se estableció como un estado más de la República Mexicana. A raíz del crecimiento de Cancún durante los años 80, Holbox se fue dando a conocer como destino turístico y descanso, pero no fue hasta la década de los 90 cuando ya se empezaron a edificar más hoteles pequeños y más gente llego a poblar la isla.
En 1988, pegó en la isla, la tormenta tropical “Keith”, que los tomó por sorpresa, narra don Miguel Zapata que “después del desfile del 20 de noviembre hubo una kermesse que organizó el Comité de apoyo para la isla en la casa del pueblo. Algunos pescadores ya sabían que iba a pegar la tormenta, pues lo escucharon en ‘Radio Martí’, una estación de Cuba, la única estación que se escuchaba en la radio, pero no le tomaron importancia, y se fueron a la fiesta.
“Muchas personas por el mal tiempo se quedaron a pasar la noche ahí, pues el mal tiempo a todo lo que daba y las personas ni en cuenta, pues seguían en la fiesta, cuando quisieron irse a su casa ya no pudieron”, explicó.(Luis Méndez/Quintana Roo Hoy)