Paloma Wong / Grupo Cantón
Chetumal.- Alrededor de 450 familias resultaron afectadas por severas inundaciones en comunidades rurales de los municipios de Bacalar y Othón P. Blanco, a causa de la Onda Tropical Número 7, que al interactuar con canales de baja presión originados al sur de Belice, provocaron intensas lluvias sobre la Península de Yucatán, dejando un grave saldo en el sur de Quintana Roo.
La Coordinación Estatal de Protección Civil (COEPROC) informó que las comunidades de Pedro Joaquín Coldwell, Pucté, Álvaro Obregón, Javier Rojo Gómez, Cacao, Sabidos, Cocoyol, Nachi Cocom y González Ortega registraron anegamientos importantes.
En Pucté, el nivel del agua superó los 50 centímetros en menos de una hora, alcanzando registros no vistos en los últimos 18 años.
En Sabidos y Ucúm, el desbordamiento de escurrimientos obligó a evacuar a varias familias.
En Carlos A. Madrazo, los caminos construidos por la Secretaría de la Defensa Nacional como parte del Tren Maya sufrieron deslaves. Habitantes señalaron que estas obras carecen de bocas de tormenta, lo que agravó la situación.
En Chetumal, más de 40 vialidades colapsaron por encharcamientos, incluyendo puntos críticos como las avenidas Chetumal con Insurgentes, Calzada Veracruz, Pacto Obrero y Boulevard Bahía, entre muchas otras.
Algunas calles fueron completamente cerradas al tránsito, como Erick Paolo con Constituyentes, Francisco I. Madero entre Justo Sierra y Camelias, así como tramos del Boulevard Bahía.
En Bacalar, familias de al menos cinco comunidades Huatusco, Blanca Flor, Miguel Hidalgo, San Román y Río Verde abandonaron sus hogares por la crecida del agua, refugiándose con familiares ante la falta de albergues y operativos de apoyo por parte de las autoridades municipales.
Por su parte, la secretaria de Gobierno, Cristina Torres Gómez, informó que las comunidades afectadas ya han sido atendidas y el nivel del agua ha comenzado a disminuir de manera constante.
Uno de los daños más severos ocurrió en la carretera que conecta a Huatusco con Río Escondido, la cual presenta un deslave de aproximadamente 80%, limitando el tránsito y el acceso a servicios.
Además, se reportaron cerca de 5 mil hectáreas de cultivos, principalmente de caña de azúcar, bajo el agua.
Las autoridades estatales, en coordinación con la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) y Protección Civil, mantienen labores de monitoreo, limpieza y reparación de caminos.
Durante la emergencia, se habilitaron tres albergues en los municipios afectados, donde fueron trasladadas alrededor de 450 personas.
Para este domingo, ya no se encuentra ninguna persona en estos refugios temporales, gracias al descenso gradual del agua y la reapertura parcial de caminos, informaron las autoridades a través de redes sociales.
En cuanto al río Hondo, aunque sus niveles han descendido, se mantiene bajo vigilancia permanente debido a los posibles escurrimientos provenientes de las lluvias registradas en Yucatán y Campeche.
En tanto, la Coordinación Estatal de Protección Civil exhortó a la población a mantenerse informada y seguir las indicaciones oficiales ante cualquier eventualidad, ya que se pronostican más precipitaciones en los próximos días.