Jazmín Ramos / Grupo Cantón
Quintana Roo,-Los delfinarios mantendrán sus operaciones aun con la reforma aprobada por el Senado referente a la Ley General de Vida Silvestre; no obstante, sí deberán registrar cada uno de los ejemplares ante la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y evitar su reproducción.
Con base en las modificaciones al artículo 60 bis de la ordenanza en la que se prohíben los espectáculos y actividades recreativas con mamíferos marinos en cautiverio, los centros en los que se lucra con mamíferos seguirán ofreciendo las actividades recreativas a los turistas hasta que esos ejemplares mueran.
La reforma a la Ley en su artículo tercero transitorio refiere que los mamíferos marinos que ya están en cautiverio y que tengan los permisos correspondientes a la Unidad de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre (UMA) continuarán bajo el cuidado humano, lo que implica que continuarán siendo explotados.
Sin embargo, los delfinarios están obligados a realizar un inventario de sus ejemplares dentro de un plazo de 90 días a partir de que entró en vigor el decreto, esto con la finalidad de tener el censo real del número de mamíferos en cautiverios y evitar que sigan adquiriendo más mamíferos o, en su defecto, la reproducción.
El inventario, según la ordenanza, debe contar con el nombre científico del ejemplar, sistemas y número de marcas, sexo, edad, documento que muestre su procedencia y, en el caso de las hembras, si están gestantes, así como el tiempo de gestación.
Además, los ejemplares nacidos en cautiverio tienen que contar con todas sus referencias, destacando la fecha de nacimiento y la marca de sus progenitores.
En dado caso de que se incumpla, la autoridad ambiental revocará los registros del UMA.
De igual forma, la Semarnat emitirá los lineamientos para establecer el límite de edad para que un mamífero marino sea considerado aún una cría; de hecho, incluso la reforma exige a los delfinarios activos que garanticen el trato digno y respetuoso hasta la muerte de los mismos.
Finalmente, la ordenanza advierte que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) efectuará inspecciones para corroborar el número de mamíferos marinos que reportó cada propietario y que cada uno de estos cuente con una autorización vigente; de lo contrario serán sancionados.