COZUMEL.- El Ayuntamiento de Cozumel, a través del área de Ecología municipal está permitiendo irregularidades que los dañan y laceran, la integridad de los caballos por parte de los concesionarios por lo cual deberían de ser sancionados por la propia ley señaló la Mvz. Erika Flores Reynoso del Fondo Internacional Ambiental Pará el Bienestar Animal (IFAW).
“Más del 50% de esos animales no están en total bienestar y necesitan hacerse correcciones”
Flores Reynosa, indicó entorno al bienestar a animal de los caballos de las calesas y que el municipio no aplica el reglamento de bienestar animal del estado ni el de control animal y ecología municipal, dijo “mi opinión es que necesitan ponerse las pilas, necesitan iniciar a cumplir con la ley o van o va haber consecuencia de ello, estoy segura de ello “.
Señaló que médicos veterinarios especialistas en caballos de la UNAM que también pertenecen al IFAW semanas atrás realizaron inspección a los caballos de las 17concesiones activas y encontraron graves irregularidades permitidas por las autoridades municipales lo que representa maltrato animal penado por las leyes y reglamentos.
Detectaron que el agua en las “áreas de descanso” para los caballos tenía una temperatura de 35 grados, “ustedes díganme si les refrescaría un agua de 35 grados” y enfatizó que dicha visita de los especialista fue de cortesía y permitida por los caleseros pues ellos no son autoridad, es la Subdirección de ecología quien tendría que hacer estas revisiones que están en su reglamento y tiene inclusive “inspector especializados” en las calesas para detectarlo sin embargo por alguna razón no tenía registro de lo anterior.
Señaló que desafortunadamente la modificación de ley animal está atorada t no se puede esperar a que ponga en marcha, pero si se puede obligar a que se respete y se cumpla la actual, la cual no está siendo cumplida por lo que necesitan reforzarla y contar con un especialista para poder regular la actividad y tenerlos en buenas condiciones porqué se encontró a más de 40% de los 17 caballos inspeccionados que no estaban aptos para trabajar y tenían lesiones algunas leves y otras que requerían reposos total y tratamiento.
Por Alberto Tejero/Grupo Cantón