El ex gobernador Mario Villanueva Madrid fue trasladado al penal de Chetumal bajo un fuerte dispositivo de seguridad. Enfrenta varios cargos por narcotráfico y fue detenido en 1999 en la ciudad de Cancún.

Su defensa, encabezada por Jesús Armando Liogon Beltrán, argumentó que el siguiente objetivo es obtener la prisión domiciliaria, ya que Villanueva Madrid cumple con los requisitos. De hecho, su llegada a Chetumal se basa en un amparo concedido por un juez federal fundado en el estado de salud de riesgo.

El secretario estatal de Seguridad Pública, Rodolfo del Ángel Campos, manifestó que se brindaron las facilidades para el traslado e ingreso del ex mandatario, pero no tendrá trato especial o comodidades. Inclusive, no se reforzaron las medidas de seguridad en el centro penitenciario, agregó.

Afuera, algunas líderes de colonias populares ratificaron su solidaridad mediante cartulinas y muestras de afecto.

En conferencia de prensa, el hijo del ex gobernador, Carlos Mario Villanueva Tenorio, y Jesús Liogon Beltrán manifestaron que el caso está cerrado en la cuestión penal y que tiene avanzada el 70% de su condena. Por ello, buscarán el arraigo domiciliario.

“El traslado se desarrolló a petición del ex gobernador. El caso Mario Villanueva ya está cerrado penalmente. Ahora viene la posible libertad o prisión domiciliaria”, destacó Liogon.

Villanueva Tenorio expuso que su padre se centrará en recuperar su salud y libertad, pues no tiene otros intereses. “Sabemos que no podemos reprimir a que la gente emita sus propios juicios pero no vamos a participar ni fomentar acciones políticas o electorales. Mario Villanueva va a recuperar a su familia. No pudo estar en el sepelio de su mamá y su hermano”, destacó.

Aprovecho para agradecer el apoyo y facilidades del secretario de Gobernación, Carlos Navarrete Prida, y del gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, en el traslado.

Las visitas a Villanueva Madrid quedarán restringidas a su familia, en tanto decide a quienes más aceptará.

ASÍ ARRIBÓ

10:45 horas. Llegó en avioneta privada, le esperaba la Policía Procesal.

Trasladado en un suburban gris con matrícula UUK-479-D, custodiado por la unidad 13005 de la Policía Procesal con placas TR-159-A4.

Ingresó a la cárcel por el estacionamiento de los juzgados. Vestía pantalón gris con suéter blanco y bufanda.

Tras la certificación, quedó en un área acondicionada por las enfermedades que padece: hipertensión arterial, próstata y enfermedad pulmonar obstructiva crónica. (SAMUEL CAAMAL/ GRUPO CANTÓN)