CHETUMAL, Q. Roo.- La crisis económica que desató el “gasolinazo” ahora está pasando factura a los políticos en cargos de elección popular, la mayoría de ellos prefiere que otros se “aprieten el cinturón” o se busquen alternativas de largo plazo como frenar la corrupción o disminuir los diputados plurinominales antes que recortar su sueldo, mientras que el promedio de los ciudadanos sacrifica parte de su quincena para pagar impuestos.

Las protestas que se desataron desde el 1 de enero en todo el país, primero fueron pacíficas, aunque algunas derivaron en saqueos de tiendas y actos vandálicos.

A la par, el empresariado se sumó a la inconformidad, se apartó del gobierno y por el contrario, le pidió eficiencia y transparencia en el gasto de gobierno.

De diferentes organizaciones de la iniciativa privada surgieron propuestas para que el gobierno también se “apriete el cinturón” y no sólo los ciudadanos, y la mayoría recayó en el ámbito político y gubernamental: disminuir el número de diputados federales en la Cámara baja –actualmente son 500-, eliminar el número de legisladores plurinominales en el Congreso del Estado –suman 10 personas-.

RECORTE A PARTIDOS

Otras también, apuntaron a recortar el monto que se le asigna a los partidos políticos en todo el país y que asciende a tres mil 940 millones de pesos. Este presupuesto en comparación con el IMSS es 6.3 veces mayor; con respecto al Issste, es 19.9 veces mayor; y en comparación con los recursos asignados al Seguro Popular, es 32.5 veces mayor.

Otras acciones de fondo que propusieron senadores del PAN fue desaparecer y fusionar secretarías federales para disminuir la carga de salarios: eliminar Sedatu y fusionar Turismo, Economía y Energía. Pero ninguna va en el sentido de rebajar sus gastos personales por uso de celular, de vales de gasolina y de bono navideño, entre otros.

REACCIONES

Javier Lozano Alarcón, senador del PAN por Puebla, fue uno de los primeros en inconformarse en la reducción de su salario: “Yo vivo de esto, esa demagogia de decir con mucho gusto doy la mitad de mi salario ¿y luego, a robar o qué?”, aseguró.

Sí se mostró a favor de reducir el presupuesto a los partidos políticos, o bien, implementar políticas de austeridad en la administración pública federal, pero sin tocar su sueldo.

Y esa misma reacción de defensa al salario tuvo la diputada panista, Patricia Sánchez Carrillo: “Cuando uno llega a una diputación, ha sacrificado muchas cosas, incluso tiempo, familia y que existan de por medio unas medidas, añadidas al salario, uno no puede decir de entrada ‘a mí no me dé seguro médico, a mí no me dé esto, lo otro, o renuncio al 50% mi salario, porque yo no lo instituí, y si vamos a renunciar, vamos a renunciar todos”, admitió tras reconocer que recibe 53 mil pesos al mes.

Y similar postura hubo entre los diputados locales Juan Ortiz Vallejo, quien ahora es independiente; Jesús Zetina Tejero, del PAN; y José Luis González Mendoza, del PRI.

Consideran que es sólo pura demagogia y por lo tanto no están de acuerdo en su recorte salarial, y menos aún de sus vales de gasolina que al mes suman 20 mil pesos.

“Una alternativa es que en lo sucesivo se disminuya el número de plurinominales en el Congreso del Estado de Quintana Roo a fin de que baje a 15 legisladores, mientras que el número total es de 25 actualmente”, dijo González Mendoza.

“Obviamente, reduciría de manera fuerte el peso de las finanzas tanto del estado como del Congreso, porque son cantidades altas, pero más allá, también damos plena representatividad a cada uno de los 15 distritos con cada uno de los diputados electos por mayoría relativa”, indicó.

La iniciativa va a ser presentada en febrero en el Congreso del Estado y es similar a la que presentó el presidente Enrique Peña Nieto de disminuir el número de legisladores en la Cámara de Diputados, y que también impulsan los ciudadanos para que la carga financiera sea menor, debido a que para pagar el sueldo mensual de los 500 diputados federales se erogan aproximadamente 26.5 millones de pesos –trabajen o no trabajen-.

Insistió en que con los 15 diputados que fueron electos por voto directo se podría sacar el trabajo legislativo.

INSENSIBLES

El presidente del Observatorio Legislativo en Quintana Roo, Eduardo Galaviz Ibarra, consideró que los argumentos que cada uno de los legisladores, estatales o federales, han manifestado ante la insistencia de la sociedad de que ellos también deben reducir sus gastos, sólo demuestra insensibilidad.

Y también revela que los políticos consideran que hay dos clases de mexicanos: los privilegiados y los demás.

“Es una falta de sensibilidad política tener ese tipo de comentarios y es una de las dificultades que tenemos que resolver, porque evidentemente, todo eso está en unas leyes aprobadas por los mismos diputados, en los presupuestos de egresos y los tabuladores de nómina que tienen ellos”, aseguró.

“Hay un argumento legal de que no le puedes bajar un sueldo a un funcionario y que no le puedes dar un sueldo menor al que se está estipulado, esto obviamente, es una defensa para ellos para que no se bajen el sueldo”, agregó.

A nivel estatal, dijo, el año pasado plantearon al Congreso del Estado reducir el presupuesto que había asignado la décima cuarta legislatura que era de 750 millones de pesos, y lo modificaron los actuales diputados a 350 millones de pesos, pero esa cantidad, de acuerdo a los integrantes del Observatorio, resultó aún elevada porque debió bajar a 240 millones. (Virginia Prospero / QUINTANA ROO HOY)