CHETUMAL.- La laguna de Bacalar aún no presenta daños considerables, tal y como se señaló en el reportaje del ‘New York Times’ sobre la Laguna de Bacalar, en el que se hace énfasis respecto a la contaminación de la laguna de los siete colores.
Linda Flor Argáez Calderón, presidente de la Asociación de Hoteles y Restaurantes de Bacalar, dio a conocer que no hay que ocultar los problemas ecológicos, pero la aseveración de este medio internacional tiene un impacto directo en la imagen de este polo turístico del sur del estado.
“Este tipo de notas nos perjudica en cuestión turística, ya que cada quien puede interpretarlo a su manera. La laguna en estos momentos ya presenta algún grado de contaminación, pero no en el grado que, digamos, que no es apta para nadar”, aseveró.
Por lo tanto, hizo un llamado a las autoridades de los tres órdenes de gobierno para que se atienda el tema del drenaje sanitario, se apruebe el PDU y el POEL, así como que se cuente con una planeación de la ciudad, ya que si bien este cuerpo de agua presenta un deterioro, pero no en el grado como expone el ‘New York Times’.
Lo anterior para que este destino turístico continúe conservando su belleza, sobre todo los siete colores que la caracterizan.
Argáez Calderón señaló que, como empresarios en conjunto con la sociedad civil, patrocinan una campaña permanente de concientización ambiental, que incluye capacitación para empresarios, empleados y taxistas, así como información de carácter orientativo para los turistas, con el objetivo de contrarrestar los daños que registra la laguna de los siete colores, así como la atención a los estromatolitos.
Por Paloma Wong/Grupo Cantón