CHETUMAL.- Como ya se había anticipado, al mero estilo “porro” y poniendo en práctica lo aprendido a su paso por el PRI, la multifacética senadora de Morena por Quintana Roo, Marybel Villegas Canché, puso en marcha la “operación abucheo” en contra del gobernador Carlos Joaquín, aprovechándose de la visita de Andrés Manuel López Obrador al estado para la presentación de la Estrategia Nacional de Turismo.
La operación, trascendió se había planeado desde hace más de 15 días desde la oficina del presidente municipal interino de Othón P. Blanco, José Luis Murrieta, quien es fiel “operador” político y “títere” de Luis Gamero, consistió en infiltrar a un grupo de “acarreados” a la ceremonia alusiva al Día de la Bandera, donde tenían la encomienda de abuchear al gobernador cuando fuera mencionado por López Obrador y durante su participación en el presídium.
Los acarreados fueron traídos a Chetumal en autobuses desde Cancún, posiblemente con cargo al erario y de acuerdo con lo que circula en redes sociales, supuestamente con gastos “patrocinados” por Aholibama Torres y Pedro Rivero.
Llamado a la unidad
Aunque el evento es de suma relevancia para el estado, esto a Marybel Villegas no le importó y echó a andar su plan, también pese al llamado a la unidad y reconciliación que ha reiterado el presidente y que hoy recordó en su participación en la ceremonia.
López Obrador advirtió que sólo en la dictadura hay pensamiento único, “mientras que en la democracia hay diversidad, hay pluralidad”; por eso destacó que este 24 de febrero, Día de la Bandera, debe ser un día de reconciliación: hizo un llamado a los mexicanos a unirnos y que no hay otro partido más que México.
Así respondió el mandatario a los reclamos y abucheos lanzados por una parte de los “acarreados” al gobernador del estado, Carlos Joaquín González, durante su intervención; López Obrador hizo énfasis en que “estamos trabajando de manera coordinada con el gobernador, se ha portado a la altura, no me importa que estén de acuerdo… mi pecho no es bodega, siempre digo lo que pienso”, dijo dando así una lección y ejemplo de buena política.
Y es que estas mañas de la senadora, “morena” por fuera pero multicolor por dentro, no son nuevas.