CHETUMAL, Quintana Roo.- María de Monserrat Cerón Ortega es directora de U Can Learning Internartional Services, una empresa de intercambio estudiantil de origen canadiense. Se considera a sí misma una mujer conservadora y tradicionalista, que no comparte algunos conceptos del feminismo.
“Los hombres no son nuestros enemigos, somos complementos. Yo por ejemplo no podría trabajar sin el sexo opuesto”, responde cuando se le pregunta sobre su condición de mujer.
Aunque se asume así misma como una mujer tradicionalista, está lejos de serlo, pues es empresaria y trabaja “desde las 7 de la mañana hasta muy tarde todos los días”.
Sin embargo, ello no le ha impedido ser al mismo tiempo esposa, madre e impulsora de proyectos tanto en el sector privado como en el público.
“Como mujer empresaria, es difícil crecer un poco en los sectores, debido a como nos manejamos en México, donde la mujer es concebida sólo para la cocina; sin embargo, hemos demostrado nuestra capacidad, manejando lo mismo que el aspecto laboral, que los hijos, el esposo y la casa, todo al mismo tiempo”.
Desde su punto de vista el feminismo ha enfocado mal el tema de la relación con los hombres, a los cuales se les ha pretendido ver como enemigos del sexo femenino, pero en realidad ello no es así.
“La liberación femenina, ha sido mal enfocada, sería mejor si nos complementamos, si trabajamos de la mano, y no nos enfrentamos de manera permanente”.
Considera además que ese mal enfoque del feminismo ha omitido la competencia que se ha generado entre las mismas mujeres, lo cual en su caso ha sido más difícil de sobrellevar que la propia “competencia” con los hombres.
Sin embargo, está luchando por impulsar la participación de la mujer en el sector laboral, mediante el llamado Movimiento MUT, del cual ella es miembro fundador.
Dicho movimiento se encarga de reunir a mujeres, empresarias o no, que quieran emprender o generar una empresa.
Se reúnen cada determinado tiempo para conocer los ámbitos en los que se mueve cada una de las mujeres participantes y se vinculan para expandir sus capacidades u otorgar un nuevo servicio en la empresa de otra mujer cancunense.
Es una de las labores que mayores satisfacciones ha dado a Monserrat, aunque considera que se debe seguir haciendo mucho más labor tanto para que la mujer se conecte y genere redes de productividad y apoyo, pero también para dejar de generar concepciones que las enfrentan con los hombres y entre ellas mismas.(Jesus Vazquez / QUINTANA ROO HOY)