Julián Puente
CHETUMAL, Q. Roo
El presidente de la Industria Panificadora en el sur de Quintana Roo, José Villanueva García, denunció que las empresas locales están siendo víctimas de extorsiones y acoso fiscal de parte las autoridades gubernamentales, lo que ha generado una desbandada de socios y la generación de negocios que laboran en la informalidad.
Villanueva García manifestó que sospechosamente, en este último año del gobierno estatal y del gobierno municipal de Othón P. Blanco, los requerimientos de pago de impuestos y supervisiones han sido muy estrictos, mientras que las amenazas de clausuras han sido hostigosas en un intento de recaudar la mayor cantidad de dinero antes de concluir las administraciones.
Reconoció que, el número de panaderías informales o clandestinas se ha disparado debido a que muchos no tuvieron los recursos económicos para enfrentar las presiones fiscales y el hostigamiento de los gobiernos locales.
En estos momentos, la Industria Panificadora solo tiene registrados a 20 afiliados, ya que con la reforma fiscal tienen la opción de no registrarse o cambiarse de cámara. Además que, la mayoría de los que estaban afiliados decidieron optar por la informalidad para poder seguir operando un negocio, que les genere ganancias y menores compromisos de pago.