CHETUMAL.- Aunque la plataforma de salud registra un caso de lepra en Quintana Roo, José Alberto España Novelo, director del programa Fortalecimiento a la Atención Médica, antes Caravanas de Salud, dijo que ya suman en tratamiento a poco más de 10 pacientes.
De acuerdo al Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica (Sinave) Quintana Roo registra hasta la semana epidemiológica numero 47 un caso de lepra, cifra menor de la detectada en la misma semana del 2018 cuando ya eran cinco casos.
A nivel nacional, Quintana Roo se encuentra entre los siete estados que menos casos tienen, mientras que Sinaloa, Michoacán y Guerrero son las entidades con más casos al tener 34, 19 y 13 casos respectivamente en este 2019. José Alberto España Novelo, director del programa Fortalecimiento a la Atención Médica, dijo que la entidad tiene un acumulado de años atrás de poco más de 10 pacientes, que están en tratamiento, ya que esta enfermedad es prevenible y se puede disminuir la infección en la piel.
“Se puede detectar a tiempo y curar; sin embargo, las personas acuden al médico cuando la enfermedad está muy avanzada, pero tratamos de disminuir el impacto que esta ocasiona. Sabemos que en todo el país hay, aquí solo queda estar pendiente porque es una enfermedad contagiosa”, comentó.
España Novelo hizo mención que esta enfermedad se contagia cuando una persona tiene contacto directo y prolongado, alrededor de tres o cinco años, con un enfermo no tratado con posibilidad de transmitir.
El periodo de incubación de la lepra es de hasta 25 años a partir de que adquiere la infección y se presenta principalmente en varones y féminas con disposición genética, según información de la Secretaría de Salud Federal.
¿Que es?
Es una enfermedad infecciosa crónica producida por la bacteria Mycobacterium Leprae (bacilo ácido-alcohol resistente) que afecta, especialmente, al sistema nervioso periférico, la piel, la mucosa de las vías respiratorias superiores y los ojos. Se caracteriza por la aparición de úlceras cutáneas, falta de sensibilidad en la piel y debilidad muscular.
Por Paloma Wong/GRUPO CANTÓN