CRISTINA ESCUDERO
GRUPO CANTÓN
CHETUMAL.- Quintana Roo se encuentra entre los 12 gobiernos estatales que decidieron contratar financiamientos nuevos en plena pandemia bajo el esquema de préstamos, por lo que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) ubicó al estado en Semáforo Amarillo en Deuda Pública y en Semáforo Rojo en cuanto al Servicio de la Deuda, lo que significa que su endeudamiento encendió las alarmas, ya que su techo de financiamiento neto es de 5% de sus Ingresos de Libre Disposición.
Todo según datos del Registro Público Único de Financiamientos y obligaciones.
En los últimos dos años, Carlos Joaquín González ha contratado deuda a corto plazo, es decir sin pasar por la aprobación del Congreso, por 2 mil 367 millones de pesos, de los cuales 787 millones los ha contratado en los últimos meses que apareció el Covid 19.
De acuerdo a la última actualización del reporte que emite la SHCP, sobre financiamientos y obligaciones, el estado de Quintana Roo está en observación en materia fiscal debido a que en los últimos cuatros meses el gobierno estatal ha contratado líneas de financiamiento.
Pese al discurso de Carlos Joaquín González que tiene finanzas sanas, la realidad es otra y queda evidenciado a través del informe de Hacienda que publica de forma trimestral y que puede ser consultado libremente por cualquier ciudadano en la página oficial de la secretaría.
En este año, 2020, con el pretexto de la pandemia, tiene los siguientes préstamos.
El 23 de abril por 212 millones de pesos. El 22 de mayo contrató créditos por 260 millones de pesos.
Otro fue el 24 de junio otro por 315 millones.
Todos los créditos han sido contratados con Banco Mercantil del Norte, del grupo financiero Banorte.
Tan solo en el mes de mayo el gobernador panista refinanció la deuda de la entidad, contratando nueve créditos por un monto de 18 mil 948 millones de pesos, que incluyó la coberturas para liquidez y uno que utilizó para inversión productiva.
Las negociaciones que hacen es bajar el monto del pago de los intereses de deuda, pero amplían el periodo, por lo que los nietos y biznietos de los ciudadanos actuales ya están endeudados sin siquiera haber nacido.
Por eso hablan del apalancamiento o de la deuda per cápita, que no son otra cosa que maniobras numéricas para justificar el desplome financiero con tecnicismos.
Pero había una parte de inversión productiva, y habrá que esperar qué dice en su Cuarto Informe de Gobierno porque en el estado no se han registrado obras importantes, no se ha combatido la inseguridad, no se realizó algún plan emergente para el desempleo y peor aún el Covid-19 sólo vino a revelar la falta de inversión en el sistema de salud.
Estos recursos son solicitados bajo el esquema de préstamos que se utilizan para cubrir insuficiencias de liquidez de carácter temporal, que en este caso se utilizó la pandemia como pretexto de que se tenía necesidad de dinero.
El juego demagógico, de parte de Carlos Joaquín, consiste en que se amplía el plazo, se bajan el monto a pagar aunque la deuda se incremente.
Y no es nuevo.
En 2018 Carlos pidió una deuda por 2 mil millones de pesos.
En 2019 contrató cinco créditos a corto plazo, en agosto 200 millones; septiembre 100 millones; octubre 150 millones; noviembre 450 millones y en diciembre 680 millones de pesos; todos sin autorización del congreso al que ve con desprecio.
En ese entonces, en el marco de su tercer informe, la aspirante a la alcaldía de Playa del Carmen, Yohanet Torres, encargada de finanzas, dijo que había un “excelente balance financiero”.
Todo en base a maniobras de refinanciamiento y restructuraciones.
En el primer trimestre del año, Quintana Roo tuvo un decrecimiento en su economía de 5.9%, ocupando así el lugar número 29 de la lista de estados en los que se contrajo la actividad económica, esto previo a las medidas de contingencia sanitaria generalizadas en el país, con un mayor impacto en los servicios y el comercio, reportó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El “gobierno del cambio” forma parte del grupo de los 12 estados que contrataron financiamientos nuevos.
Cabe mencionar que la medición del Sistema de Alertas es realizada tanto con información de Cuenta Pública la cual es vinculante; así como con las actualizaciones trimestrales.