CANCÚN, Q. ROO.- Asur enfrenta un proceso en los ámbitos fiscal y laboral derivado del no pago de más de 126 millones de pesos por concepto de utilidades a trabajadores y ex trabajadores del aeropuerto de Cancún correspondientes a los ejercicios fiscales 2006-2007.
Sin embargo, el problema es mucho más complejo, pues desde 2014, otro grupo de ex trabajadores de Asur afectados por el mismo problema, dio a conocer que durante la revisión del expediente, se detectaron irregularidades tales como el falseamiento de las direcciones de los empleados e incluso la falsificación de al menos la firma de siete de ellos en documentos validados ante notario público y elaborados por quien ellos aseguraban era la representante legal de Asur, Dulce María Ramírez Beltrán.
El objetivo de la falsificación habría tenido como objetivo que los interesados no se enterasen nunca de que tenían derecho al cobro de sus utilidades correspondientes a los años 2006 y 2007. En ese entonces, los trabajadores aseguraron que la empresa Asur justificó el no pago de ese derecho alegando que tras el paso del huracán Wilma las utilidades generadas por el aeropuerto habían tenido que ser reinvertidas en remodelaciones y reconstrucción del aeropuerto.
El abogado de los ex trabajadores Zaúl Estrada Ciprián, explicó entonces que se interpusieron 126 denuncias por la vía penal en contra de la supuesta representante legal del consorcio Dulce María Ramírez Beltrán por falsificación de documentos oficiales, además de que se configuró el delito de fraude procesal, ya que incluso presentaron evidencia de que las listas con los nombres de más de 127 trabajadores incluye el nombre y firma del contador Héctor Márquez Varela, quien había fallecido uno año antes de que se iniciase todo el proceso legal. (Jesús Vázquez / QUINTANA ROO HOY)