CANCÚN, Q. Roo.- Por no haberse atendido en su momento, la situación de violencia en Quintana Roo ya se le salió de control al actual gobierno y se hace necesaria una acción inmediata de las autoridades para contener esta escalada.
Así lo comentó Eduardo Galaviz Ibarra, uno de los miembros más destacados del Observatorio Legislativo, conformado por cámaras empresariales y colegios de profesionistas.
El también dirigente de la Asociación de Plazas Comerciales de Quintana Roo (APC) dijo que hubo “avisos” previos como la balacera y asesinato de personas en la zona hotelera de Cancún que debieron alertar a las autoridades sobre el grave problema de violencia que está creciendo en Quintana Roo; sin embargo, no se actuó en consecuencia.
“Es un muy lamentable acontecimiento, no sólo por la pérdida de vidas humanas, que es en sí ya muy grave, sino por todo el impacto social y mediático que tendrá la noticia, con todas las repercusiones negativas que eso significa para un destino como la Riviera Maya. A todos nos debe preocupar para que esto se revierta”, dijo.
Añadió que será necesaria una coordinación de distintos órdenes de gobierno para enfrentar la situación y no descartó que fuera incluso necesaria la presencia del Ejército Mexicano para atender esta emergencia de seguridad que vive la entidad.
AUTORIDADES REBASADAS
Por su parte, Ricardo Muleiro López, presidente de Asociados Náuticos de Quintana Roo (ANQR), dijo que se trata de un evento nunca antes vivido en nuestro estado, al estar involucrados turistas internacionales, lo cual es muestra de que las autoridades están rebasadas y existe un riesgo grave de afectar la principal actividad económica del estado que es el turismo.
“No sólo pone en riesgo la seguridad de los mexicanos, sino también la seguridad de nuestros visitantes y con ello el riesgo de poder perder toda la derrama económica que tenemos del turismo. Tiene apenas un par de meses que sucedió una situación similar en la zona hotelera de Cancún, ahora en puntos de mucha afluencia turística en Playa del Carmen, y esto no se puede volver a dar”, puntualizó.
Carlos Gosselin Maurel, dirigente de los hoteleros de Cancún, dijo que este terrible evento tendrá repercusión internacional en el peor momento posible, es decir, apenas unos días antes de la toma de posesión de Donald Trump en la presidencia de Estados Unidos, pues eventos de esta naturaleza pueden ser tomados como pretexto para ampliar sus políticas proteccionistas hacia el intercambio turístico entre México y Estados Unidos. (Jesús Vázquez / QUINTANA ROO HOY)