CANCÚN, Q. Roo.- Aunque en el discurso oficial se niegan afectaciones a la actividad turística por la escalada de violencia en Cancún y la Riviera Maya en las últimas semanas, organismos empresariales anunciaron el lanzamiento de al menos dos campañas de comunicación que buscan contrarrestar las noticias negativas sobre el Caribe mexicano relacionadas con hechos delictivos.
El pasado 16 de enero ocurrió una balacera en la discoteca Blue Parrot, con un saldo de seis muertos; al día siguiente sucedió un ataque a la Vicefiscalía de Justicia en el centro de Cancún, que cobró la vida de otras cuatro personas, y a raíz de estos hechos, han continuado las ejecuciones, e incluso, han aparecido “narcomantas” que anuncian la supuesta llegada de un nuevo grupo delictivo a la entidad.
La secretaria de Turismo estatal, Marisol Vanegas Pérez, ha declarado en reiteradas ocasiones que no hay ninguna afectación a la ocupación hotelera de los diferentes destinos de Quintana Roo por las noticias de violencia que se han difundido en las últimas semanas.
Sin embargo, el pasado miércoles se lanzó en Cancún la campaña de comunicación “Cancuners”, en la que participa la Asociación de Clubes Vacacionales de Quintana Roo, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) y la Asociación Mexicana de Agencias de Viaje (AMAV), con la intención de difundir en redes sociales y portales de empresas turísticas testimoniales e imágenes de experiencias positivas de turistas en el Caribe mexicano.
PROYECTAN CORDIALIDAD
Ayer, Carlos Gosselin Maurel, dirigente de la Asociación de Hoteles de Cancún (AHC), anunció una segunda campaña de comunicación para disipar noticias negativas sobre Cancún, pero también enfocada a proyectar cordialidad hacia el visitante estadounidense que podría verse influenciado con las políticas antimexicanas de Donald Trump. Gosselin Maurel señaló que se desplegará publicidad en autobuses y hoteles de Cancún y la Riviera Maya con mensajes de unidad nacional y cordialidad hacia los visitantes extranjeros, buscando proyectar mensajes positivos que impulsen una imagen distinta a la que se difunde por los hechos delincuenciales. Ayer mismo el consejo directivo de la AHC se reunió también con representantes de la Secretaría de Gobernación para delinear una estrategia de seguridad de cara a la próxima temporada de Spring Break, respecto de la cual Gosselin Maurel dijo que será una “prueba de fuego” en materia de seguridad, así como para medir el impacto del discurso antimexicano en este segmento turístico. Anunció que se sumarán elementos de seguridad federales y se reforzará la vigilancia en las principales zonas turísticas de Quintana Roo.
El dirigente hotelero dijo que la entidad vive una etapa en la que “vienen pruebas de presión hacia el gobierno desde distintas áreas”, ante lo cual dio un voto de confianza al gobernador Carlos Joaquín; sin embargo, advirtió que si el gobierno no da una respuesta positiva en términos de seguridad, salud, y desarrollo, “entonces sí tendríamos un descalabro”.
El propio jefe del Ejecutivo estatal dio a conocer que reforzó su esquema de seguridad personal, en función de la mejora de los protocolos necesarios para su integridad. (Jesús Vázquez / QUINTANA ROO HOY)