CANCÚN
Según información oficial, existen 22 de las 46 funerarias dadas de alta y registradas en Quintana Roo en las que fueron detectadas numerosas irregularidades durante la pandemia del Coronavirus COVID-19.
Unas por cobros excesivos para los servicios funerarios, manejo inadecuado y erróneo de los cadáveres y de hostigar a los deudos de las personas fallecidas, sobre todo, por el virus.
El responsable de la Comisión Federal de Protección contra Riesgos Sanitarios en la entidad, indicó que una de las razones principales por las que han sido sancionadas ha sido por no llevar a cabo correctamente los procesos y protocolos sanitarios sobre el manejo de fallecidos por Coronavirus; así mismo por realizar el cobro de cosas que no se aplican, estafando a quien contrató sus servicios y que representan riesgos sanitarios públicos
CASO DE “DULCES RECUERDOS”, FUNERARIA SUSPENDIDA EN JULIO Y QUE OPERABA DE MANERA CLANDESTINA
Esta ‘funeraria’ originaria de Tabasco tiene ya antecedentes de malos manejos y pésimo trabajo con los cuerpos de fallecidos por COVID y otras enfermedades.
El más reciente sucedió el miércoles 12 de agosto de 2020 en Cancún, donde la funeraria antes mencionada fue denunciada por familiares de un fallecido ante la FGE Quintana Roo por haber cortado las piernas de un cadáver para colocarlo dentro de un ataúd, esto sin la autorización o consulta de la familia del difunto.
El motivo del fallecimiento de la persona fue por Cirrosis Hepática, indicó la familia.
La familia del occiso refirió que el representante de esta funeraria, a quén identificadon como ‘Miguel’, pidió el pago de $12,500 pesos por realizar todo el servicio funerario, no sin antes cobrarles $2,500 pesos de más para poder entrar al Hospital General de Cancún con un traje especial para poder recoger los restos mortales del difunto y evitar contagiarse de Coronavirus COVID-19.
Lo pero del caso es que tampoco embalsamaron al fallecido, por lo que fue velado en un estado de putrefacción evidente.
Esta ’empresa’ ya había sido previamente suspendida en julio pasado y sus oficinas ubicadas en la Av. Cobah fueron clausuradas, aunque rápidamente reabrieron en otro espacio sobre la Av. Talleres y Av. Leona Vicario, y de de manera clandestina retomaron operaciones.