CANCÚN, Q.Roo.- El Obispo de la Prelatura de Cancún-Chetumal, Pedro Pablo Elizondo Cárdenas, indicó que Cancún requiere de una “intervención divina” para poderse recomponer de toda la problemática presentada en los últimos meses, entre ellos, la falta de seguridad.
Lo anterior, al hablar de los lamentables hechos registrados la semana pasada en esta ciudad, entre ellos, la agresión a balazos de una familia en la Región 201 y el suicidio de una madre, que antes asesinó a sus dos hijos en el Fraccionamiento Prado Norte.
El jerarca de la Iglesia Católica en Quintana Roo, reconoció que México y por consecuencia el principal destino turístico del país, tiene retos enormes y solamente con la presencia de Dios se puede evitar el deterioro del tejido social.
“Si no hay una intervención del cielo, esto nadie lo va a arreglar y será un desastre. Nosotros no vamos a dejar de pedirle a la Virgen y consagrarnos a ella para recibir la protección de Dios”, puntualizó. (Manuel Sánchez/Quintana Roo Hoy)