Jesús Vázquez
CANCÚN, Q. Roo.
En los últimos años, el gremio de músicos y artistas nacionales que amenizan los hoteles de Cancún y Riviera Maya han ido perdiendo la batalla frente a la contratación de artistas extranjeros, los cuales han abaratado la profesión y los han llevado a perder sus empleos.
La dirigente del Sindicato de Músicos y Artistas de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), Evangelina Martínez Tovar, estima que de un universo de 3 mil artistas en Cancún, 40% están desempleados ante la dura competencia que han impuesto artistas dominicanos, cubanos, argentinos, venezolanos e incluso españoles, quienes para quedarse con el trabajo llegan a ofrecer a mitad de precio el costo de sus servicios respecto de lo que marca el tabulador en Quintana Roo.
La lideresa asegura que en la Riviera Maya la situación es aún peor, puesto que de un estimado de 4 mil músicos y artistas, el desempleo es de hasta 60%, lo cual ha llevado a la CROC a tener que intervenir como organismo sindical que aglutina 98% de los contratos colectivos con hoteles.
Martínez Tovar asegura que una de las irregularidades que han encontrado es el cobro que exigen los departamentos de animación de los propios hoteles a los músicos para permitírseles trabajar durante una temporada.
“Las cabezas de los hoteles muchas veces no están enteradas de lo que sucede; simplemente asignan un presupuesto al departamento de animación y éste lo que hace es hacerlo que rinda lo más que se pueda, contratando al menor costo posible a los artistas; pero también hemos descubierto que piden ‘mochadas’ a los músicos para permitirles trabajar”, expone la entrevistada.
La estrategia que ha adoptado el sindicato ante esta problemática es exigir en los contratos colectivos y en las negociaciones de contratación anuales que se respete el tabulador de sueldos vigente en el estado, y aplicarlo de manera irrestricta, sin distinción de nacionalidad de los artistas.
Actualmente, explica, un músico que ameniza en un hotel debe estar cobrando no menos de 700 pesos la noche; un mariachi se cotiza en 30 mil pesos por presentación, mientras que la contratación por temporada se cotiza hasta en 40 mil pesos.
La otra estrategia de la CROC ha sido tratar directamente con los gerentes generales de los hoteles para exponerles la problemática y hacerles de su conocimiento las prácticas “y transas” de los departamentos de animación, en los que recae la contratación de músicos y artistas para los hoteles.
La lideresa dijo que han logrado cambios extraordinarios en hoteles como el Paradisus y Coral Beach, ambos en Cancún, donde luego de que evidenciaran las prácticas corruptas de los departamentos de animación, lograron que las gerencias generales tomaran el control de esos departamentos y aplicaran los tabuladores de salarios que han establecido de común acuerdo la CROC y los hoteles en sus negociaciones anuales.