Jesús Vázquez
CANCÚN, Q. Roo
Con gran convocatoria se llevó a cabo la primera jornada del congreso “Gente Nueva Cancún Haz que Trascienda” con la destacada conferencia de José Hernández Moreno, astronauta mexicano de la NASA, quien ante un auditorio de más de 1,000 jóvenes, relató la serie de fracasos previos a su éxito como viajero de las estrellas.
En 11 ocasiones consecutivas fue rechazado en el proceso de selección para ingresar como aspirante a astronauta de la NASA. Se tuvo que convertir en piloto y buzo profesional, pues estos eran los perfiles que con mayor frecuencia eran escogidos para las misiones al espacio.
Ya dentro del grupo de 100 aspirantes seleccionados, en tres ocasiones fue descartado para integrar el último grupo de los 15 que son entrenados para convertirse en astronautas.
No fue sino hasta su intento número 12 que logró librar todos los filtros y convertirse en el segundo astronauta de origen mexicano. Su misión despegó el 28 de agosto de 2009. La nave en la que despegó, Apolo 17, alcanzó una altura de 400 kilómetros, tras pasar de cero a 25,000 kilómetros por hora, que es el impulso que le permite vencer la fuerza de gravedad de la tierra.
Una vez arriba, la velocidad de desplazamiento les permite dar una vuelta completa al globo en 90 minutos. Su misión fue llevar 7 toneladas de suministros a la base espacial internacional, donde Hernández Moreno fue el encargado de operar un brazo robótico para las maniobras en las caminatas espaciales.
Sin embargo, reconoce que la cúspide de su éxito, es decir, haber viajado al espacio, no fue lo más difícil de su historia, sino haber pertenecido a una familia de migrantes michoacanos, que llegó a trabajar la pizca en los campos del estado de California 60 años atrás.
Su extracción humilde y su falta de arraigo, debido a su vida trashumante entre México y Estados Unidos, le impusieron condiciones de vida muy difíciles, de las que supo sobreponerse, con el apoyo de sus padres.
Hoy vive agradecido de las oportunidades que supo aprovechar en Estados Unidos, como la de estudiar una ingeniería y perseguir su sueño de viajar a las estrellas.
Hernández Moreno tiene hoy una fundación en la que apoya a niños migrantes de escasos recursos para que estudien y como él puedan lograr trascender pese a las adversidades de la vida.
Previo a su conferencia se presentaron en el congreso las pláticas de Tito Quiroz, premio nacional de la Juventud 2015; Rosy Orozco, presidenta de la Comisión Unidos Contra la Trata; así como Karla Munguía, documentalista de Animal Planet.
Para este sábado se contará con la presencia de Marco Matos, primer receptor mexicano de la NFL; Martha Delgado, fundadora del programa Eco-Bicis; Marco Pérez, coordinador del Pacto Mundial de las Naciones Unidas en México, así como del ex presidente Felipe Calderón Hinojosa, quien cerrará el congreso.