El presidente Andrés Manuel López Obrador celebró en Quintana Roo, la ceremonia del perdón al pueblo maya, por los agravios cometidos durante la Guerra de Castas.
“Aquí por un imperativo de ética de gobierno, pero también por convicción propia, ofrecemos las más sinceras disculpas al pueblo maya, por los terribles abusos que cometieron particulares y autoridades nacionales y extranjeras en la Conquista, durante los tres siglos de dominación colonial”.
Acompañado de su homólogo de Guatemala, Alejandro Giammattei, quien acudió como invitado especial, el primer mandatario resaltó que la ceremonia se inscribe en las conmemoraciones de los 500 años de la “invasión europea”.
Este perdón, lo ofrece el Estado mexicano, y forma parte también para rememorar los 700 años de la fundación de Tenochtitlan y los 200 de la independencia nacional.
La ceremonia se llevó a cabo con la presencia de representantes del pueblo maya, en el poblado Chan Santa Cruz, donde se ubica el Santuario de la Cruz Parlante.
El primer mandatario hizo entrega de la proclama de la Cruz Parlante a la ciudadana Ana Karen Dtzib Poot.
En la ceremonia Ana Karen Dtzib Poot en nombre del pueblo maya, pidió al presidente López Obrador trascender el discurso y pasar a los hechos.
La oradora resaltó la sensibilidad del primer mandatario hacia los pueblos originarios por lo que “además del acto de perdón, además de las palabras, pasen a hechos concretos”.
Hechos como la creación de una comisión de memoria, el reconocimiento y justicia, así como la elaboración de un plan de desarrollo que involucre a los representantes mayas, así como el reconocimiento pleno en la Constitución de la dignidad y los derechos de su pueblo.
“Con el liderazgo de nuestros dignatarios y autoridades tradicionales, proponemos un plan de desarrollo para el pueblo maya, para atender nuestras necesidades más apremiantes”, expresó Ana Karen Dtzib Poot.