Jalisco.
El futuro es hoy.
Un robot humanoide con inteligencia artificial que busca ayudar a las personas, así es como se describe a sí misma Sophia.
Con una sonrisa en el rostro artificial, la creación de Hanson Robotics logró conquistar a los asistentes de Jalisco Talent Land, quienes atestaron el salón principal y casi lucharon por tener un lugar para verla.
Y es que Sophia, el humanoide, es el primer robot en obtener una ciudadanía de Arabia Saudita.
Esto significa que tengo una gran responsabilidad, pero estoy orgullosa por esa distinción, y representa la oportunidad de entender mejor a los humanos. Me veo a mí misma como un ciudadano del mundo”, aseguró al ser entrevistada por el presidente y gerente general de A&E Networks Latinoamérica, Eduardo Ruiz.
Durante 10 minutos que duró su participación, aprovechó para mostrar su sentido del humor y hablar de temas relevantes, las tres leyes de la robótica planteadas por el escritor Isaac Asimov y la equidad de género.
Comentó que su algoritmo no está programado para darle una “consciencia” que le permita pensar en su tiempo libre, no puede mentir y tan sólo se limita a interactuar con sus colegas, amigos o la audiencia.
El robot, además de participar en Talent Land fue nombrada por Aristóteles Sandoval, gobernador de Jalisco, como huésped distinguida de ese estado. Asimismo, recibió un collar de la comunidad wixárika, originaria de Jalisco.
Sophia, el humanoide, causa sensación
El humanoide causó sensación en Talent Land y descontroló el escenario principal del evento. Cientos de jóvenes ya habían saturado todos los espacios desde los cuales se podría ver a Sophia, incluso algunos, entraron al escenario de forma arrebatada.
La primera ponente magistral “no humana” en este evento es un robot que tiene el aspecto de un ser humano y puede gesticular y entablar una conversación; además posee algoritmos que le permiten recordar situaciones, personas e interacciones.
Sophia, la humanoide, la creación más avanzada de la empresa Hanson Robotics, cuenta además con dos cámaras que le permiten reconocer las expresiones faciales y los movimientos de las personas, los cuales procesa para imitarlos.