CIUDAD DE MÉXICO.- Sus padres lo abandonaron para que muriera de hambre porque pensaban que era un brujo y ahora está a punto de asistir a su primer día de escuela.
Una trabajadora social lo encontró demacrado, en los huesos y cubierto de gusanos. La mujer que lo rescató ha subido fotos de su recuperación y evolución.
Hope, oriundo de Nigeria ahora tiene dos años, y “realmente disfruta la vida” afirma Anja Ringgren Loven, la danesa que vive en África y lo salvó.
Anja salvó la vida de Hope el 30 de enero en 2016 y después de un año en trabajar en la recuperación del niño ahora presume orgullosa el primer día de escuela del pequeño.
Aquí algunas fotografías sobre la evolución en la vida del pequeño de dos años y también algunos de los momentos más duros cuando fue rescatado: