Estados Unidos y Francia defendieron ayer el bombardeo contra instalaciones de armas químicas en Siria y junto a Gran Bretaña iniciaron una ofensiva diplomática en los principales organismos internacionales para cercar al régimen de Bashar al Assad y limitar el respaldo de Rusia.
Desde París, el presidente Emmanuel Macron se jactó de convencer a su homólogo Donald Trump para mantener las tropas estadounidenses en Siria, por un largo plazo, y aseguró que la operación militar, perpetrada la madrugada del sábado, contra el régimen de Al Assad no supone una declaración de guerra, sino una defensa del derecho internacional y de las resoluciones de la ONU.
“Tuvimos éxito en el plano militar: todos los misiles lanzados alcanzaron sus objetivos, las capacidades químicas del régimen sirio han sido destruidas y no hubo ninguna víctima colateral. Hace diez días, el presidente Trump decía que Estados Unidos consideraba irse de Siria, nosotros le convencimos de que era necesario quedarse de manera duradera”, aseguró Macron.
La decisión de permanecer en el país árabe fue confirmada por la embajadora de la Casa Blanca ante las Naciones Unidas, Nikki Haley, quien aseguró que las tropas continuarán en Siria hasta asegurar que las armas químicas de Al Assad no se usen de ninguna manera que ponga en riesgo los intereses de Estados Unidos, que el Estado Islámico (EI) sea derrotado y que haya una posición ventajosa para observar lo que Irán está haciendo.
En tanto, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, reiteró, durante una llamada con su par iraní, Hassan Rouhani, que más ataques de Occidente a Siria conducirían a un “caos” en los asuntos internacionales.
Por su parte el secretario de Relaciones Exteriores británico, Boris Johnson, defendió la decisión de la premier, Theresa May, de participar en la ofensiva aérea y dijo que no tienen planes para nuevos ataques con misiles en Siria, aunque evaluarán sus opciones si Damasco vuelve a usar armas químicas.
El presidente Donald Trump también alabó la ofensiva militar contra Siria y se defendió de las críticas por emplear la expresión “misión cumplida”, utilizada por George W. Bush en la guerra en Irak. “La ofensiva siria estuvo tan perfectamente ejecutada, con tal precisión, que la única manera que tuvieron los medios de comunicación falsos de menospreciarla fue por mi uso del término misión cumplida”, se lamentó Trump en su cuenta de Twitter.
En un movimiento concertado, Washington, Londres y París propondrán hoy en el Consejo de Seguridad una resolución que obligue a Siria eliminar su arsenal químico, una promesa que Damasco y Rusia efectuaron en 2013, pero nunca se cumplió. LA FURIA. Partidarios del clérigo chií irakí Moqtada al-Sadr queman una bandera de EU contra los ataques aéreos occidentales.