Posteriormente los servicios de emergencia llegaron al apartamento donde el bebé se encontraba en un cuarto oscuro. Presentaba signos de desnutrición y tenía gusanos en la ropa.
Este 29 de octubre, en una corte del condado de Henry, en Iowa, comenzó el juicio, donde el médico forense reveló desgarradores detalles de la muerte del menor.
El médico presentó fotos donde se veían las condiciones en las que se encontraba el bebé, con mantas empapadas de orina y ropa manchada de heces. El cuerpo se encontraba en un asiento tipo columpio.
Las causas de la muerte del bebélas presentó, y estas fueron la deshidratación, la desnutrición y la dermatitis severa que derivó en heridas en la piel.
“Cada una de estas condiciones habrían sido suficiente individualmente para matar a cualquier bebé”, afirmó el doctor.
La trabajadora social Sheila Schroeder, que llevó el caso, ante el jurado expresó que el bebé nació con rastros de matanfetaminar en su cordón umbilical, comprobando que el padre consumía estas sustancias.
Advertisement. Scroll to continue reading. La pareja tiene otra hija de dos años, quien fue llevada a un hogar provisional donde permanecerá hasta que termine el juicio y determine el juez qué es lo que pasará con la menor.
En el juicio también rindió su testimonio el oficial John Turbett, a quien Zachary le confesó que nunca cambió el pañal de su bebé y que la última vez que le dieron de comer había sido semanas antes.
“Esas eran normalmente responsabilidades de Cheyanne Harris, la madre, y que la suya era cuidar de la hija.”
Aún falta escuchar la versión de la madre; el juicio seguirá durante la semana.