La Bolsa argentina recuperó este martes algo de las pérdidas del lunes que originó el resultado de las elecciones primarias donde la oposición se impuso al oficialismo por amplio margen.
El índice accionario S&P Merval de Buenos Aires cerró con una ganancia de 10.66 por ciento, a 30 mil 465.69 unidades, luego de finalizar el lunes con un derrumbe superior al 37 por ciento, una de sus peores caídas de su historia y a niveles de finales de agosto de 2018.
En términos de dólares, el desplome del lunes de la Bolsa argentina fue de 48 por ciento, el segundo peor en la historia de los 94 mercados que sigue Bloomberg desde 1950.
En tanto, el peso argentino cerró en 55.65 unidades por dólar, una pérdida de 4.76 por ciento, según datos de Bloomberg. El lunes, la divisa cayó 15.27 por ciento, a 53.5 por dólar.
El opositor Alberto Fernández logró una abrumadora diferencia sobre el mandatario Mauricio Macri el domingo en las primarias de Argentina, lo que lo dejó a un paso de ganar la presidencia en las elecciones de octubre.
Si bien aún faltan dos meses para las elecciones generales, las primarias son consideradas un preciso sondeo de lo que podría acontecer en octubre en Argentina, donde una crisis económica golpeó la imagen de Macri en el último año y revitalizó al peronismo en la oposición.
Macri es el favorito de los mercados, que temen que Fernández impulse una fuerte intervención del Estado en la economía, como hizo durante su gestión su actual candidata a la vicepresidencia, la exmandataria Cristina Fernández de Kirchner.
“Los mercados reaccionan mal cuando se dan cuenta de que fueron estafados. El Gobierno los condujo a este estado de cosas con los bonos que emitieron”, dijo el lunes Alberto Fernández en una entrevista radial.
Por la tarde, Macri le respondió en una conferencia de prensa, en la que culpó a la oposición por la reacción negativa de los mercados.
Con el 98.7 por ciento de las mesas escrutadas, el Frente de Todos de Fernández consiguió el 47.7 por ciento de los votos, contra el 32.1 por ciento de Juntos por el Cambio, la coalición de Macri, según el conteo oficial.
De obtener este resultado en los comicios de octubre, Fernández evitaría un balotaje, que solo se disputaría si ninguno de los postulantes obtiene más del 45 por ciento de los votos o el 40 por ciento y una diferencia de 10 puntos porcentuales sobre el segundo.
Analistas consultados por Reuters dieron prácticamente por ganadas las elecciones a Fernández, aunque Macri declaró por la tarde que confía en “revertir este mal resultado de ayer”.
“Los resultados abren un escenario desafiante, con una transición muy larga. Tanto el Gobierno como la oposición enfrentan un dilema: negociar debería ser crítico para una transición ordenada, pero también podría reducir su competitividad de cara a las elecciones de octubre”, informó el banco Citi en un reporte.
El próximo presidente asumiría su cargo el 10 de diciembre.
Con una pobreza que creció al 35 por ciento, según cálculos de investigadores privados, y una inflación superior al 55 por ciento anual, la apuesta por la transparencia y la realización de obras públicas fue insuficiente para Macri.
Con información de El Financiero