Redacción / Grupo Cantón
México.- El caso de la influencer Marianne Gonzaga, acusada de apuñalar a Valentina Gilabert, continúa generando tensión en la opinión pública. En entrevista con el programa Ventaneando, transmitida el pasado 3 de octubre de 2025, Ernesto Gilabert, padre de la víctima, denunció una serie de amenazas que ha recibido su familia a través de redes sociales.
“Recibimos amenazas todos los días”, afirmó el padre, visiblemente afectado. “Tanto Valentina como mi otra hija, su mamá y yo estamos siendo hostigados. Nos escriben cosas como ‘vamos a terminar lo que empezamos’”.
Ernesto explicó que ya han recurrido a la Policía de Investigación para pedir apoyo, y expresó su temor de que la situación pueda salirse de control, en medio de la exposición mediática y el proceso judicial en curso.
“No es un mal chico”, Ernesto Gilabert defiende a José Said
En la misma entrevista, Gilabert se refirió por primera vez a José Said, joven que habría sido el detonante de la disputa entre Valentina y Marianne. Pese a los señalamientos de Gonzaga, quien definió la relación como “tóxica”, el padre aseguró tener una buena impresión de él.
“Es un buen chavo. Ha estado al pendiente de Valentina y eso lo valoramos. Puedo no estar de acuerdo con la relación, pero no es un mal chico”.
Llamado a Marianne Gonzaga, “Queremos darle fin a esto”
Respecto a las publicaciones recientes de Marianne Gonzaga, quien continúa haciendo declaraciones sobre el caso en sus redes sociales, Ernesto Gilabert pidió frenar el enfrentamiento público.
“Esto ya se salió de lo privado. Nosotros le pedimos a Valentina que no se enganche, pero también debe haber límites para quienes están bajo supervisión judicial”, dijo, en referencia a la sentencia que cumple la influencer.
Audiencia de cómplices: una libre, otro busca acuerdo
Finalmente, el señor Gilabert habló sobre la audiencia intermedia de Aitzane N. y Akram N., señalados como presuntos cómplices del ataque. Aitzane fue liberada al cumplirse el plazo legal sin sentencia, mientras Akram —mayor de edad— busca llegar a un acuerdo legal con Valentina.
“Queremos justicia, pero también paz. Pedimos empatía. Somos una familia tratando de reconstruirse”, concluyó.