Puebla.-Perla Cristel Martínez Vargas tiene 7 años, quiere estudiar para convertirse en médico. En tanto, César Zoé Ramos Bautista, a sus 11 años, se siente agradecido con las especialistas que lo atendieron en el Hospital San José del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), pero en especial, con su hermana, quien a los 6 años se convirtió en su donador para el trasplante de linfocitos, tratamiento que lo mantiene estable.
Ambos padecieron de leucemia linfoblástica aguda infantil, un tipo de cáncer en el que la médula ósea produce demasiados linfocitos inmaduros. Se le considera como el cáncer más agresivo, el cual les fue detectado en 2014.
Aunque los protocolos médicos establecen que una persona que ha padecido esta enfermedad debe mostrar un buen nivel de salud por los próximos cinco años para considerarse curado, las especialistas, Vanessa Terán Cerqueda y Uendy Pérez Lozano, señalan a los menores como sobrevivientes de este padecimiento.
Las galenas explicaron que los menores recibieron tratamiento temprano, puesto que el cáncer se les diagnosticó a los 4 y 6 años, respectivamente.
Terán Cerqueda y Pérez Lozano señalaron que los padres de los menores se percataron de los síntomas, ya que presentaban dolores en los huesos, fiebre, anemia, sangrados en las encías y moretones en el cuerpo sin razones aparentes.
En el caso de César Zoé, fue atendido en el hospital de San Alejandro, sitio donde de inmediato fue canalizado al nosocomio de San José, donde las pruebas confirmaron que padecía cáncer.
Pese a las altas probabilidades de rechazo de un donante mujer a un receptor hombre, César fue sometido a un trasplante de células madre de la medula ósea, a través de la donación de su hermana. Ahora él, su familia y las especialistas celebran el éxito que alcanzaron.
Miguelina Vargas Castro –madre de Cristel- apuntó que tras descubrir el cáncer en la sangre de su hija, ésta fue canalizada al área de Oncología del IMSS, donde recibió ciclos de quimioterapia y un tratamiento integral para lograr preservar su vida, así como acompañamiento psicológico para su rehabilitación integral.
Vanessa Terán Cerqueda, hematóloga pediatra encargada de la Clínica Hematológica de San José, indicó que cada año, la delegación estatal del IMSS diagnostica de 25 a 30 niños con cáncer, principalmente, originarios de Oaxaca, Tlaxcala y Puebla. Señaló que de la cifra total de casos de cáncer, el 35 por ciento corresponde a menores.
Por último, Uendy Pérez Lozano, responsable del Área de Trasplante Hematopoyético en el IMSS Puebla, informó que la delegación Puebla es uno de los espacios médicos que más trasplantes ha realizado, ya que desde 2013 han registrado 40 trasplantes haploidénticos.
FUENTE/MILENIO