El empresario Alonso Ancira llegó a México procedente de España, después de que la justicia del país ibérico concediera su extradición.
Aterrizó en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), en un avión CL60 de la Fiscalía General de la República (FGR) con matrícula XB-NWD.
Ancira Elizondo es señalado por corrupción y blanqueo de capitales, delitos por los cuales enfrenta un proceso penal con la FGR.
La investigación contra Alonso Ancira se originó por una denuncia que Petróleos Mexicanos (Pemex) presentó en marzo de 2019 “con motivo de una serie de delitos que motivaron un grave daño patrimonial a esa empresa”.
Los delitos que se le atribuyen están relacionados con la investigación en marcha de la venta a un supuesto sobreprecio de una planta de fertilizantes hecha a Pemex en 2013.
Según los investigadores, la venta de esa planta fue sellada con un sobreprecio de 500 millones de dólares por Altos Hornos de México (Ahmsa) cuando Pemex era dirigida por Emilio Lozoya Austin, quien también se enfrenta un juicio en México.
Fuentes del Gobierno de México indicaron que la planta de fertilizantes no tenía un valor que superara los 50 millones de dólares, por lo que se considera que el sobreprecio afectó de forma negativa a Pemex, además de que todavía no funciona por estar obsoleta.
El auto judicial argumenta que Alonso Ancira cooperó en el blanqueo de capitales de Lozoya, “pagando por adelantado” para que cuando este fuera el director general de Pemex se procediera a la “adquisición de una empresa obsoleta e inoperativa por un precio tres veces mayor del que realmente vale en el mercado, perjudicando con ello, además, los intereses públicos”.
Con información de López-Dóriga Digital y EFE