Agencias
CIUDAD DE MÉXICO
En México la prevalencia del VIH es considerada baja y se calcula que hay 220 mil personas infectadas, donde los hombres que tienen sexo con personas del mismo género encabezan las estadísticas, seguidos por los usuarios de drogas intravenosas, sexoservidores, transgéneros y presos. No obstante, los números muestran que cada vez son más los contagios heterosexuales y en mujeres de escasos recursos.
Sergio Bautista Arredondo, investigador del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), ha analizado por varios años el comportamiento de esta epidemia en el país, y en uno de sus estudios más recientes, publicado en el International Journal for Equity in Health, encontró que hay claras diferencias entre las características sociodemográficas de hombres y mujeres con VIH que viven en la Ciudad de México.
El investigador menciona que la falta de autonomía y empoderamiento social y económico hace a las mujeres propensas a sufrir abusos sexuales. La violencia en el acto sexual es un factor que aumenta las probabilidades de transmisión del VIH.
“Además, para estas mujeres es más difícil cuidarse de sus propias parejas y exigirles tanto exclusividad como el uso de preservativos. Muchas veces sus parejas son migrantes, o simplemente al no contar con capital humano o económico la mujer no se siente en posición de exigir”, planteó. Con información de Sin embargo.