HIDALGO.- Calles solitarias, en silencio y aparentemente en calma es el panorama que se percibe el día después de la tragedia ocurrida en el municipio de Tlahuelilpan, Hidalgo.

Los pobladores no logran asimilar que decenas de vecinos perdieron la vida durante la explosión en una toma clandestina. Pese a esto, están convencidos que la necesidad los llevó a sustraer el combustible de la forma en que lo hicieron.

“En este caso hubo una fuga, la gente se acercó por necesidad porque nosotros somos de los municipios más olvidados del estado y del país. Sí, yo venía aquí, lamentablemente no tengo carro, si yo tuviera un auto por necesidad lo hubiera hecho”, narró Jesús César, habitante de Tlahuelilpan.

Tlahuelilpan es un municipio formado por menos de 20 mil personas. Trabajar en el campo es una actividad que realiza la mayor parte de la población, por lo que los mismos habitantes descartaron que en el incidente estuvieran involucrados huachicoleros.

“Muchas veces no medimos los riesgos, medimos más la necesidad y el hambre, si la gente lo hace es por ahorrarse 20 pesos, pagar por litro de gasolina. En ocasiones la gente se motiva tanto y tanto es la necesidad que a veces los niños y los adolescentes sienten la necesidad del alimento en la casa, carecen de vestido, carecen de educación pues carecen de sustento alimenticio”, justificó Jesús César.

Y es que las carencias y falta de servicios son evidentes, basta con transitar por las principales avenidas para notar que el lugar está en el olvido.

“Observen las calles, tenemos casi nuestras calles destruidas, carecemos de infraestructura pública y de economía. Lo único que puedo decirles es que en este momento Tlahuelilpan está en un momento histórico, hay mucha tristeza en mi municipio”.

En 2018 se registraron más de mil 800 tomas clandestinas en el estado de Hidalgo, la mayoría de ellas se concentró en la región de Tula y esta vez en Tlahuelilpan la actividad ilícita cobró la vida de decenas de personas.

Cortesía: Excelsior