Ciudad de México.- Al finalizar la actual administración, ésta no dejará en “sequía” al campo mexicano, sino que el balance, pese a pendientes, es positivo, afirmó el secretario de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), Baltazar Hinojosa Ochoa.
“No lo dejamos a secas, para nada, al contrario, vamos a dejar un campo con mucha actividad; con una ganadería con más de 25 millones de unidades de producción, con una pesca con valor de 40 mil millones de pesos en todos los rubros, y donde hay una gran cantidad de productores de granos, oleaginosas y hortalizas que están prosperando en el ámbito comercial y el autoconsumo”, sostuvo.
Durante una entrevista con Excélsior, reconoció que como encargado de la dependencia no logró hacer que la producción del campo mexicano impactará favorablemente en los lugares donde existe pobreza extrema.
También dijo que faltó un mayor impulso a alimentos por excelencia mexicanos como los frutos rojos y el mezcal, y hacer cambios más profundos en la política agropecuaria, rubro que consideró son los retos que heredará a la siguiente administración.
“Cumplimos en su mayoría los objetivos del Plan Nacional de Desarrollo (PND). Como secretario, me hubiera gustado avanzar más en cómo hacer que a través del incremento de la producción en el campo mexicano se hubiera impactado más y directamente en los segmentos en donde existe la pobreza extrema del país”, sostuvo.
Actividad en transformación
El secretario llegó a ocupar la dependencia hace cuatro meses, en sustitución de José Calzada Rovirosa, y a pesar de su corta estancia al frente de la Sagarpa, Hinojosa Ochoa tiene el objetivo de dejar la visión de un productor agropecuario, es decir, hacer las cosas en tiempo y forma, respetando la naturaleza, para tener el máximo rendimiento.
De ahí que consideró que la gran oportunidad que tendrá quien llegue a ocupar la dependencia en el nuevo gobierno será que el campo se siga transformando.
Y es que anticipó que el sector alcanzará un valor de producción de un billón de pesos en 2018 en los tres rubros que la representa: agricultura, ganadería y pesca.
Mientras que cerrará este año con exportaciones cercanas a los 35 mil millones de dólares, con una balanza comercial superavitaria de casi seis mil millones de dólares y un crecimiento del 20 por ciento, en comparación con el año anterior.
Esto se debe, dijo, a que México se convirtió en una potencia agroexportadora en productos como el aguacate, tequila y frutos, un indicador de que se puede potenciar la producción sin generar desabasto nacional.
Para Hinojosa, el campo ha crecido y se ha desarrollado gracias a la canalización de recursos para su financiamiento a través de la banca de desarrollo, la banca comercial y financiamientos, lo que ha permitido hacer crecer la actividad productiva.
En ese sentido, mencionó que la Reforma Financiera logró llevar crédito a los pequeños productores, emprendedores y mujeres, por lo que, con un valor 350 mil millones de pesos destinados al campo en financiamiento, se logró uno de los objetivos del PND.
“Estos resultados significan que la actividad primaria está en un proceso de transformación; esta visión es la que debe tener la siguiente administración, un gran reto, pero encantador”, expresó.
Más apoyo para el sur-sureste
Hinojosa reconoció que, si bien el sector agropecuario creció desde 2012, hay ciertos lugares donde no se ha alcanzado un mayor potencial, principalmente en la actividad del autoconsumo en zonas de Oaxaca, Guerrero y Chiapas.
Es ahí, dijo, donde se requiere hacer planteamientos adicionales en políticas públicas, para hacer que los pequeños productores se vean beneficiados de las asociaciones, de la tecnificación, y de la intervención en los procesos de producción.
Con el programa El Campo en tus Manos, enfocado en la mujer, se logró beneficiar a un sector de la población, pero se requiere ser más específicos porque falta capacitación, financiamiento, y acciones en paralelo”, sostuvo.
Además, reconoció que dos de los productos que requieren mayor impulso son los frutos rojos y el mezcal; en su visión, las llamadas “berries” pueden convertirse en un mercado más grande que el aguacate y el jitomate, gracias al ritmo de crecimiento que han reportado.
Mientras que aseguró que se debe dar más impulso, ordenado, transparente y con apoyo a pequeños productores de mezcal, pero conservando su esencia artesanal.
“Hay que cuidar la producción a futuro, para beneficio de las comunidades, que sean un ejemplo de cómo proteger lo nacional, abastecer el consumo local y potenciarlo en los mercados internacionales”, precisó.
Baltazar Hinojosa reconoció que si bien la Sagarpa logró sacar de la pobreza extrema a un sector de la población dedicada al campo, junto con otras dependencias, la desigualdad en el país sigue siendo el gran pendiente no sólo del próximo gobierno si no de las futuras generaciones.
Fuente/Excelsior