JESÚS VÁZQUEZ
GRUPO CANTÓN
CANCÚN. Se presentaron este lunes dos proyectos piloto para el aprovechamiento de residuos sólidos orgánicos de cuatro municipios del estado mediante los cuales se generará biogás, energía eléctrica y composta. La inversión requerida es de 58.8 millones de dólares.
Uno de esos emprendimientos se ubicaría en Cozumel, y consiste en una planta de aprovechamiento del biometano que producen los residuos sólidos urbanos (FORSU) proveniente de hoteles, clubes de playa y restaurantes de la isla.
La planta tendría capacidad instalada de 0.193 megawatts hora para la comercialización de energía eléctrica a baja escala. Además podría generar hasta 3mil 325 toneladas de composta al año y evitaría la generación de hasta 9 mil 501 toneladas de bióxido de carbono al año.
La inversión de la planta es de 6.3 millones de dólares de financiamiento privado.
Es beneficioso para la economía, el ambiente y la sociedad en su conjunto. Permitirá ampliar la vida útil del relleno sanitario, mitigando emisiones de gases efecto invernadero. El modelo construido crea valor consistente en la sustentabilidad, en el manejo de los residuos orgánicos y generación de energías limpias, comentó Efraín Villanueva Arcos, secretario de Medio Ambiente del gobierno de Quintana Roo.
El retorno de inversión está calculado a 12 años y 7 meses a partir del inicio de operaciones del proyecto, considerando al menos 50% de aportación a fondo perdido por parte del gobierno o algún otro programa de financiamiento internacional, según el desglose financiero presentado.
El segundo proyecto consiste en la instalación de un módulo de biodigestión para producción de biometano a partir de los residuos sólidos orgánicos que se confinan a los rellenos sanitarios de los municipios de Benito Juárez, Puerto Morelos e Isla Mujeres. El producto sería comercializado como sustituto del gas natural.
El biodigestor podría generar hasta 275 mil 954 millones de unidades térmicas británicas MMBtU al año, además podría mitigarse de gases de efecto invernadero de 166 mil 653 toneladas de bióxido de carbono al año. La inversión prevista es de 52.5 millones de dólares.
La venta del biometano sería través de contratos con condiciones de mercado ya que el producto tiene un precio muy competitivo
El retorno de inversión está pensado a un plazo de 9 años y seis meses, con recursos totalmente privados, explicó Villanueva Arcos.
Representantes de la agencia alemana de cooperación GIZ, en conjunto con funcionarios del gobierno del estado, explicaron que ambos emprendimientos fueron presentados a instituciones bancarias de financiamiento como Bancomext y Banobras, los cuales concluyeron que son rentables y factibles de ser financiados por programas internacionales que combaten el cambio climático o en su caso por instituciones gubernamentales.
“La evaluación financiera del proyecto presenta resultados positivos y es beneficioso para la economía, el ambiente y la sociedad en su conjunto. Crea valor mediante la sustentabilidad en manejo de los residuos orgánicos y la generación de bioenergéticos renovables. Bancomext y Banobras consideran que por la magnitud del proyecto tiene un atractivo para la inversión privada o una empresa paramunicipal. La venta del biometano sería través de contratos con condiciones de mercado ya que el producto tiene un precio muy competitivo”, dijo.