Es una enfermedad poco conocida y mucho menos investigada, si bien estimados amigos vitales, todos tenemos claro qué es la obesidad, sin embargo la entidad de la “obesidad sarcopénica”, abarca dos aspectos fundamentales, por un lado hay una pérdida de masa muscular, de ahí la palabra sarco que significa músculo, penia, disminución, acompañado de un incremento de masa grasa, como se puede observar en la imagen.

Tiene factores asociados, se puede presentar en personas que atraviesen por estrés metabólico, como cáncer, VIH, quemaduras graves, también está asociado a la edad, con el pasar de los años, los adultos mayores, tienden a perder masa muscular, y con esto, también se puede impactar la movilidad, disminuyendo a su vez, la fuerza muscular, y a la par incrementarse la masa grasa, esta grasa se infiltra en el músculo y ocasiona dolor, y dificulta el funcionamiento de otros sistemas entre estos el metabólico, pudiendo ocasionar síndrome metabólico que es la antesala a enfermedades crónico degenerativas.

Si bien es una enfermedad que puede tener mayor prevalencia en el adulto mayor, recientemente en la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco, encontramos indicios de obesidad sarcopénica en personas de treinta años promedio, asociado a estilos de vida no saludables, los participantes refirieron una baja actividad física, ayunos de más de tres horas en el día, ambos factores evidenciaron una masa muscular menor y mayor porcentaje de grasa corporal, si bien lo interesante de los hallazgos es que podemos tener personas con un IMC normal, pero que su composición corporal, presente menor porcentaje de masa muscular y mayor porcentaje de grasa.

Hoy el camino es la detección oportuna y la modificación del estilo de vida, que si bien no es la única causa si representa un riesgo alto, nuestra población de padecer a etapas más tempranas, una enfermedad que ocasiona perdida de la autonomía, afectando gravemente la calidad de vida.
“La salud es vital”.