Hola amigos, para crear este artículo pedí apoyo de una especialista en comportamiento canino sobre un tema que todos los amantes de mascotas sufrimos en casa: educarlo para hacer sus necesidades fuera de casa.
Y surge la eterna pregunta: pero ¿por qué? Pues voy a intentar responderla. Primero enseñaste a tu cachorro a orinar en los periódicos y, a medida que fue creciendo, conseguiste que lo hiciera fuera de casa, pero a veces parece que a tu perro se le ha olvidado todo y empiezas a ver orines en lugares insospechados.
Razones para entender mejor a tu perro:
1. Incorrecta educación. Quizás crees que le has educado correctamente, sin embargo, tu perro aún no tiene claro que no puede orinar dentro de casa. Las claves son: regañar en el mismo momento en que orina dentro de casa, recompensar la conducta cuando lo haga fuera de casa en el mismo momento en que lo haga y cumplir con unas rutinas de pipí puntuales, es decir, salir siempre a las mismas horas “al baño”.
2. Ansiedad. En muchas ocasiones, la sobreexcitación lleva a que el perro se le escape algo de orina o directamente se orine encima. ¿Solución? Evitar sobreexcitarlo hasta ese punto, enseñándole a calmarse ante puntuales situaciones. Otra razón es por ansiedad. Suele ocurrir en perros que sufren ansiedad por separación, y es esa soledad y esa separación lo que les lleva a orinarse. ¿Solución? Tratar el problema de la ansiedad por separación.
3. Sumisión/emoción. Suele pasar mayoritariamente en perros cachorros y, en el caso de perros adultos, ocurre en aquellos que son sumisos. Ocurre cuando el dueño llega a casa de trabajar o con desconocidos. ¿Solución? ignorar la conducta de saludo cuando el perro está más nervioso y dejar que se calme para saludarlo más tarde.
4. Marcaje territorial. Se da en perros que tienen muy marcado el instinto de territorio y mayoritariamente en machos. Ser estrictos en la educación es fundamental y, en casos más graves lo mejor es recurrir a la castración para eliminar las hormonas que lo inducen a marcar con su orina.
5. Trastornos médicos. Los perros con problemas renales, infecciones urinarias, cálculos en la vejiga o diabetes suelen no poder controlar la orina, al igual que los perros ancianos, que van notando cómo van perdiendo el control de la vejiga. La solución es consultar el veterinario y tratar cuánto antes las dolencias.
Una vez que tengas identificada la razón o razones, ya puedes actuar para acabar con el problema. Educación o veterinario, en ambos lados puedes recurrir a la solución de los pipís en casa y recuerda, que nunca debes utilizar ni gritos ni mucho menos la violencia.