Si eres una persona de mal genio, entiendes a la perfección que cada pequeña cosa que sale mal te pone furiosa. No te puedes controlar en ese momento de rabia y otras personas se mantienen alejadas de ti. Si estás convencida de que la ira es perjudicial y no es la solución a un problema, empieza a trabajar para superarla.

Consejos:

1. Medita regularmente. La meditación es la mejor manera de mantenerse tranquila. Cuando estás enojada, estresada o molesta, aísla el ruido y las personas que te rodean y medita durante un tiempo. Esto te ayudará a sentirte relajada y positiva.

2. Cálmate y piensa en una solución. La mayoría de nosotros se enoja cuando las cosas van mal y no encontramos una solución. Enojarse no ayuda de ninguna manera. Por el contrario, si puedes tomarte unos minutos para calmarte y pensar en una solución, serás capaz de resolver el problema mucho mejor.

3. Haz algo para sentirte más relajada. Puedes ver un video gracioso o contacta amigos que son divertidos. Serás capaz de distraerte durante un momento al menos.

4. Practica el perdón. Cuando alguien te haga enojar, aprende a perdonar. Ponte en sus zapatos y ve cómo lucen las cosas. De esta manera puedes identificarte con ellos y perdonarlos por lo que han hecho. Esto te ayudará a deshacerte de tu ira y calmarte.