Sentir envidia hasta cierto punto es normal, pero si llega a obsesionarte o a incidir en tu vida, se puede convertir en un grave problema. Reconocer este sentimiento te ayuda a descubrir tus propias carencias emocionales y a superarlas.
Los psicólogos consideran la envidia como un sentimiento de inferioridad, que desemboca en culpabilidad y que la persona siente por no poseer atributos que considera perfectos.
Hay algunos rasgos de personalidad que pueden llevar a una mayor probabilidad de sentir envidia, como:
- El egocentrismo
- La baja autoestima
- La ira
- El rencor
- El egoísmo
- Personas que les gusta ser el centro de atención
- Personas a quien les importa demasiado la opinión de los demás
- Personas que se consideran poco valiosas
La envidia nace de la falta, de la carencia. De querer poseer algo que no tenemos o ser alguien que no somos, por eso, para alejarla de tu vida:
1. Haz un recuento de tus cualidades y fortalezas.
2. No te compares, esto daña tu amor propio y no te permite reconocerte como un ser único. Pierdes el tiempo y te desgastas mentalmente.
3. Piensa en que todas las personas tienen su momento para brillar, tal vez hoy le toque a alguien más y mañana sea a ti.
4. Usa la envidia positivamente y haz que te motive a lograr tus objetivos.
5. Si notas que a tu alrededor hay una personas que sólo presume su logros para hacerte sentir mal, aléjate. Esa persona también tiene un problema de autoestima.
(Redacción / GRUPO CANTÓN)
