Está por iniciar el verano y a tan solo unas semanas de disfrutar de la playa, este placer nunca se había convertido en algo tan molesto, sobre todo si sufres una infección vaginal por hongos.

 Las señales más fáciles de reconocer son las secreciones espesas y blancas, picor, ardor o irritación en la vagina, inflamación de la vulva, dolor o escozor al orinar o mantener relaciones sexuales, por destacar las más usuales.

Consejos:

Limpiarse siempre de adelante hacia atrás para no contaminarse de materia fecal.
Bañarse con cuidado y retirar todo rastro de arena
Secarse bien las zonas íntimas
No utilizar jabón perfumado alrededor del área genital
Usar ropa interior hecha de algodón
Durante el periodo menstrual es recomendable cambiar los tampones de manera continua y, si es posible, usar toallas sanitarias
Si vas a usar continuamente traje de baño, asegúrate de cambiarlo inmediatamente después de usado.
Al estar en contacto directo con arena, procura siempre sentarte sobre una toalla para mantenerte limpia y evitar algún tipo de irritación.