Existen un gran número de insectos y otros bichos que pueden picar a tu mascota, por ejemplo: pulgas, garrapatas, algunas arañas, avispas y hasta abejas. Los animales de compañía pueden presentar una reacción ligera, pero en ocasiones puede ser severa. Es importante que conozcas las especies de insectos y artrópodos que viven en tu localidad.
El signo más común de una picadura es el dolor en el sitio, inflamación y enrojecimiento. En ocasiones, puede hincharse la cara o los belfos (labios). Generalmente, no pasa a mayores. Pero, como ocurre con las personas, los animales de compañía también pueden ser sensibles o alérgicos a la saliva o al veneno de los insectos. Estos individuos pueden presentar una inflamación severa de la piel, vómito, dificultad para respirar o incluso (rara vez) la muerte.
Las alergias a los piquetes de las pulgas es muy común y producen prurito intenso en el área lumbar y lateral de los perros y de los gatos, incluso se arrancan el pelo y se producen costras e infecciones secundarias. ¡Una sola pulga puede desencadenar una reacción tremenda y de larga duración!
El diagnóstico se basa en los signos específicos o en la historia clínica, que incluye la picadura de un insecto. En ocasiones, tu médico veterinario podrá necesitar tomar una muestra de sangre, para hacer un conteo de los glóbulos blancos llamados eosinófilos, que aparecen aumentados cuando hay una reacción alérgica.
Como sucede también con las personas, la reacción no solo depende del tipo de insecto que ha picado a tu mascota, también depende de su reacción individual. Puede ser un insecto relativamente inofensivo, como una abeja. Pero si tu perro o tu gato son alérgicos, puede desencadenar una reacción alérgica severa, sobre todo si no es la primera vez.
Las picaduras por abejar son más frecuentes durante la primavera y el verano y generalmente aparecen en la cara, pues los perros y los gatos tienden a olfatear o morder todo. Así que puede hincharse la cara o los labios. Notarás que se tallan la cara, con las patas o contra el suelo.
La mayoría de las arañas que habitan en el país no son venenosas, así que las picaduras ocasionan solo dolor e inflamación en el sitio afectado. Sin embargo, hay algunas excepciones, y en esos casos aparecerán lesiones más graves, como úlceras, que tardan en cicatrizar y pueden producir problemas más serios.
Pero existe una gran variedad de insectos que pueden picar a tu mascota, sobre todo en el exterior: garrapatas, que transmiten enfermedades peligrosas; tábanos (moscas mordedoras), que producen un prurito intenso; mosquitos, que también son responsables de transmitir muchas enfermedades y pueden producir también comezón e infección del sitio de la picadura.
El tratamiento para las picaduras en los animales es igual al de las personas: retirar el aguijón, si es picadura de abeja. Limpiar la herida. Administrar un medicamento recetado por tu médico veterinario. Los perros y los gatos que presentan reacciones alérgicas más severas requerirán terapia de líquidos vía endovenosa y permanecerán hospitalizados por unas horas.
La prevención es importante, y puedes usar cualquier producto contra pulgas y garrapatas o algún repelente de los que están disponibles comercialmente. Te sugiero consultar con tu médico veterinario para elegir la opción más adecuada para tu mejor amigo.