CIUDAD DE MÉXICO.- Tras popularizarse en todo el mundo, y después de años de ser efectuados con la ayuda de palos o soportes, los selfies se disponen a levantar vuelo, sin las limitaciones de los anteriores sistemas.

La nueva herramienta para tomar fotos y videos desde distancias y perspectivas imposibles hasta ahora, es una cámara compuesta por cuatro motores de turbohélice y una cámara de video de 5 megapíxeles de resolución, alojados en una carcasa de aluminio anodizado, con el dispositivo denominado AirSelfie.

Esta cámara puede volar a más de 20 metros de altura y, cuando no es utilizada, se guarda junto con el móvil dentro una funda rígida especial, compatible con las marcas más populares de teléfono, que también sirve para recargar la cámara voladora en 30 minutos.

EL BUEN DESPEGUE

Los hermanos Edoardo y Marco Stroppiana, cofundadores de la compañía AirSelfie Holdings, explican que las micro-turbohélices de la cámara son los más pequeñas y potentes fabricados hasta ahora, y posibilitan que el aparato vuele de un modo estable y fluido y que pueda agarrarse con la mano en el aire con facilidad, de acuerdo a sus creadores.

La cámara dispone de un avanzado procesador, un sistema de absorción de vibraciones y mecanismos estabilizadores de vuelo, que garantizan imágenes estables, claras y fluidas.

La funda de la AirSelfie contiene una batería que permite recargar la cámara voladora en 30 minutos al introducirla en su interior, también puede ser recargada a través de un cable microUSB o un banco de energía, dándole una autonomía de vuelo de una hora en total. (Agencias /QUINTANA ROO HOY)