CANCÚN,Quintana Roo.-Además de la inseguridad que impera en la zona del “Crucero”, otro de los problemas que se realiza de manera discrecional y sin ningún control sanitario es la prostitución masculina.
Desde hace años este punto de la ciudad es conocido por las personas de la diversidad sexual como un punto de encuentro y además como un área de trabajo sexual.
En el parque “Nuevos Horizontes”, justo frente a la Plaza las Tiendas, basta una mirada para llamar al prospecto y tener en la bolsa mínimo 200 pesos para tener acceso a un encuentro sexual.
La mayoría de los sexoservidores son originarios de Chiapas, Veracruz y Tabasco y originalmente llegaron a Cancún en busca de una mejor calidad de vida; sin embargo, vieron en su cuerpo una opción sencilla y rápida para obtener recursos económicos.
Tal es el caso de Erick “N” de 19 años quien llegó a este punto de la ciudad por recomendación de amigos y aunque en un principio no tenía contemplado realizar este oficio, dijo que la paga es buena y a veces por muy poco tiempo.
Describió que la negociación es sencilla, los clientes son hombres homosexuales y rara vez se atiende a mujeres.
Mi trabajo, dijo, consta de llegar comenzar a caminar por la zona y cuando detecto a alguien que me observa comienzo a seducirlo con la mirada, él se acerca, le digo el costo del servicio y lo demás es historia.
Relata que en su caso trata de dar un excelente servicio para que su cliente lo vuelva a buscar.
Aclaró que no es homosexual e incluso en la mayoría de las veces ni siquiera siente placer por estar con otro hombre.
“No soy homosexual, solo es un trabajo y así lo veo. Hay clientes que quieren algo más y se involucran emocionalmente. Cuando eso sucede ellos mismos te dan dinero sin tener sexo a cambio y es mejor porque no hago nada más que estar de acompañante”, resaltó.
EL FENÓMENO DE LAS REDES
Para Roberto Guzmán Rodríguez, presidente de la Asociación Red Positiva de Quintana Roo, el trabajo sexual en las calles como se conocía ha disminuido y este ha migrado a las redes sociales como Facebook.
Sin embargo, el caso de “El Crucero” ha logrado subsistir debido a que el perfil de los que ofrecen un trabajo sexual es diferente y realmente obedece a una necesidad económica.
“Sí se sigue presentando el trabajo sexual en la zona del “Crucero”, pero este se da por una necesidad económica y para muchos es atractiva la oferta de un homosexual”, resaltó.
En ese contexto, indicó que sea cual sea la forma de ofrecer el servicio sexual, muchos de los hombres no utilizan condón y están expuestos a contraer el virus de VIH.
Detalló que tan solo de mayo a la fecha, de 300 pruebas que se aplicaron a hombres, 67 salieron positivas y la gran mayoría son personas que tuvieron sexo por dinero.
Estimó que de seguir la tendencia cuando concluya el año se habrá detectado por lo menos 150 casos. Pese ello, dijo, lo más importante es que si salen reactivos inicien un tratamiento médico y evitar nuevos casos. (Manuel Sánchez/Quintana Roo Hoy)